Un hecho ligado al horror ocurrió en Kansas, Estados Unidos, luego de que una mujer decapitara a su hijo de seis años y al perro de la familia porque pensaba que “el diablo estaba tratando de matarla”.
De acuerdo con Daily Star, la protagonista de esta historia se llama Tasha Haefs y tiene de 35 años. Esta madre fue acusada de asesinato en primer grado y de acción criminal armada luego de decapitar a su hijo y a su perro. La policía recibió una llamada por parte de Haefs en la que aseguraba que el diablo intentaba atacarla. Sin embargo, cuando se le preguntó si sufría alguna enfermedad mental, la responsable del hecho cortó el teléfono.
Los efectivos policiales de Kansas City acudieron de inmediato a la vivienda, ubicada en la Avenida Indiana al 7300, y se encontraron con una charco de sangre en la puerta principal. Cuando se acercaron un poco más, escucharon a la mujer cantando en el interior de la casa. Empezaron a tocar la puerta pero la madre comenzó a cantar más fuerte, por lo que uno de los policías miró por una ventana de la casa y vio la cabeza cortada de un niño.
Sin dudarlo un segundo, decidieron irrumpir en la vivienda a la fuerza y se encontraron con Haefs, que tenía sangre en las piernas y los pies. También hallaron el cuerpo del niño decapitado en la cocina y, luego de registrar toda la casa, el del perro en el mismo estado en el sótano junto con dos cuchillos y un destornillador cubiertos de sangre. La policía identificó al niño como Karvel Stevens.
La madre estaba “en una situación mental tan extrema, hizo una serie de cosas muy perturbadoras”, describió la fiscal del condado de Jackson, Jean Peters Baker, en un comunicado de prensa. “La comunidad conoce ahora algunos de los terribles detalles de la muerte de este niño de seis años, nos deja sin aliento”, agregó.
El pequeño era el hijo biológico de la mujer y ésta habría admitido haberlo matado. “Cada vez que se trata de un niño, adquiere una profundidad diferente de desesperación”, sostuvo Baker y aseguró: “Es difícil imaginar el dolor de la familia de este niño. Para los compañeros de clase del niño. Sus amigos. Los vecinos. Para los primeros intervinientes que acudieron a la escena del crimen”. Los fiscales pidieron que Haefs sea detenida sin fianza y fue recluida en el Centro de Detención del Condado de Jackson.
“La muerte de este niño es un llamado a algo más. Nuestra comunidad debe atender la llamada. Las fuerzas del orden, los fiscales, los funcionarios de salud pública, los proveedores de servicios sociales, todos nuestros numerosos socios deben trabajar juntos para hacer frente a la violencia”, agregó la fiscal.
Incluso el alcalde de la ciudad de Kansas, Quinton Lucas, utilizó su cuenta de Twitter para emitir un comunicado sobre este terrible crimen que conmovió a los vecinos. “Todavía no sabemos por qué han matado a un niño de primaria esta mañana, pero entendemos el dolor que sufren una familia, una escuela y una comunidad”, sostuvo. “Ojalá que los agresores sean llevados rápidamente ante la justicia y que nos propongamos evitar más tragedias evitables como ésta”, cerró su mensaje.
En la casa donde ocurrió el crimen, los conmocionados vecinos del barrio dejan ofrendas, globos y juguetes para despedir al pequeño que fue asesinado por su propia madre.