Superación. Esa es la palabra para describir la historia de Albie Jr. Thomas, un niño de cuatro años que consiguió una proeza con una extremidad amputada: escaló el pico más alto de Gales y se ha convertido en la persona más joven en conseguirlo.
Según destaca el sitio 20 minutos, este británico nació con una enfermedad que le deformó la pierna y, cuando tan solo tenía 15 meses, los médicos tuvieron que quitarle el pie izquierdo. Sin embargo, eso no le ha frenado.
Desde que tiene dos años se mueve con una prótesis y se esfuerza por conseguir ser algún día atleta paralímpico. Este domingo, tras una fuerte nevada en Gales y, acompañado de su padre Daniel, escogió el camino más difícil para llegar a lo alto de una montaña de 1.500 metros de altitud.
En menos de cinco horas subieron y bajaron, aunque sin duda el momento más tierno es cuando toca la piedra que señala la zona más alta. Daniel ha comentado a la prensa que apoyará al pequeño Albie en todos sus sueños.
“Todo lo que quiera hacer, lo haremos. Tengo grandes planes: vamos a viajar juntos a hacer senderismo y a correr alrededor del mundo”, ha explicado y ha añadido que la forma física del pequeño está por encima de “otros chicos de su edad”. “Mientras Albie quiera ir a los Juegos Paralímpicos, voy a ayudarle a hacerlo”, ha concluido.