Profesionales de la salud en hospitales públicos y centros de atención en toda Francia se manifestaron este martes en protesta por la insuficiente contratación de personal nuevo y la escasez de recursos. Nueve sindicatos de trabajadores de la salud se sumaron a la huelga para alertar sobre lo que llamaron maltrato a los hospitales públicos y centros de atención a la tercera edad. ”La COVID-19 vino y se fue, al igual que las promesas, el horizonte parece más oscuro que nunca”, indicaron los sindicatos en un comunicado.
El acceso a la atención primaria es cada vez más complicado y los hospitales ya no cumplen su función de servicio público de última instancia por el cierre de los servicios de urgencias, quirófanos y los retrasos en la atención sanitaria por falta de personal, según el comunicado. La situación, de acuerdo con el comunicado, ha exasperado al personal existente que está “enojado y cansado porque ya no puede cumplir con su función de brindar una atención adecuada a la población a pesar de las limitaciones profesionales que afectan su salud y su vida privada”. Alrededor de 3.000 médicos, trabajadores de la salud, enfermeras y empleados del personal general han sido suspendidos de sus servicios desde el pasado año por negarse a vacunarse contra la COVID-19.
La semana pasada, el presidente Emmanuel Macron reiteró su negativa a “reintegrar a los cuidadores no vacunados” a pesar de la escasez de personal y las afirmaciones de que reincorporarlos resolvería la crisis. En los últimos años, la escasez de profesionales de la salud se ha vuelto extrema en Francia, lo que ha provocado el cierre de alrededor del 20% de las camas en más de 100 hospitales y servicios de emergencia en casi 80 hospitales.
El año pasado, 1.300 estudiantes de enfermería reclutados durante la pandemia renunciaron por cansancio y agotamiento. Los profesionales reclaman “medidas reales que garanticen el acceso, la proximidad y una atención óptima en términos de calidad y seguridad asistencial para todas las personas y en todas partes”. Estas medidas incluyen la contratación inmediata de personal como camilleros, mensajeros, trabajadores logísticos y secretarios para que los cuidadores puedan concentrarse en su trabajo.