En un documento remitido este martes a la magistrada Carmen Lucia, de la Corte Suprema, la vicefiscal general, Lindôra Maria Araújo, expresó que las informaciones disponibles “no son suficientes” para la apertura de una investigación contra el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. “Semejantes elementos no son suficientes para la inclusión del representado como investigado por los eventos en cuestión, ya que no apuntan indicios de su participación activa y concreta en ilícitos penales”, afirmó Araújo.
El pasado marzo, unas sospechas de supuestas irregularidades en el Ministerio de Educación a fin de favorecer a dos pastores evangélicos causaron la renuncia del entonces titular de la cartera, Milton Ribeiro, también pastor de una iglesia presbiteriana. Las denuncias salpicaron a Jair Bolsonaro, quien llegó a mantener reuniones con los dos pastores y fue citado en un audio por el entonces ministro, por lo que opositores solicitaron al Supremo Tribunal Federal (STF) investigar también al líder ultraderechista.
Sin embargo, la vicefiscal consideró que “una única mención” a Bolsonaro no es suficiente para convertirlo en investigado. Araújo destacó además que las presuntas irregularidades en la cartera ya se encuentran bajo investigación en la máxima corte, tras un pedido presentado por el Ministerio Público del país. A pesar de ello, aseveró que, si surgen “indicios” de su participación en los hechos, Bolsonaro sí podría pasar a integrar la lista de investigados.
“En caso de que surjan indicios de su participación en los hechos en la marcha de las averiguaciones, aquella autoridad (Jair Bolsonaro) podrá eventualmente pasar a integrar el polo pasivo del procedimiento de investigación, lo que, hasta este momento, no sucedió”, detalló.
El caso alude a las investigaciones que pesan contra los pastores evangelistas Gilmar Santos y Arilton Moura por asuntos vinculados al Ministerio de Educación, quienes forman parte de la base de apoyo que existe en esas iglesias a la gestión del líder de la ultraderecha.