El furor que se desató el domingo luego de que la Scaloneta se coronara campeón del mundo persiste en distintos puntos del país y hasta en las zonas más recónditas del mundo. Tal es el caso de un residente de Netrakona, un pueblo en Bangladesh, que compró una vaca para alimentar a todo su barrio, cumpliendo la promesa que había realizado si Argentina salía campeón en Qatar 2022.
“Mokshedul Morshed nos había dicho que iba a carnear una vaca y alimentar a todos los fans de Argentina del barrio si la Selección ganaba el Mundial. Como Argentina ganó, compró la vaca y mañana hará una gran comida para todos”, dijo al medio Télam desde Bangladesh Turja Talukder, un estudiante de 20 años oriundo de Netrakona y fanático del conjunto argentino.
“Mokshedul es muy fanático de Argentina y toda su familia ama al país. Estaba tan contento con la obtención del título que invitó a todos a su casa mañana para comer la carne asada. Cumplió su promesa, es un hombre de palabra”, resaltó Turja, quien se fotografió junto al animal, al que le habían puesto un collar de flores y una bandera de Argentina encima.
A diferencia de India, donde la religión mayoritaria es la hindú y las vacas son símbolos sagrados, en Bangladesh la religión oficial y mayoritaria es el islam, que permite comer a este tipo de animales.
Turja comentó que el domingo hubo “celebraciones toda la noche” en su ciudad por la obtención del título de la Selección Argentina.
“El partido terminó a la medianoche y volví a mi casa a las 4 de la madrugada. La gente se subió a camiones y otros autos para festejar, hubo instrumentos musicales y pirotecnia por todos lados”, relató el joven.
“Cuando (Gonzalo) Montiel metió el gol con mi padre nos dimos un gran abrazo y lloramos un rato. Eran lágrimas de alegría, de felicidad. Parecía el festejo de Año Nuevo, pero era aún más, estaba todo el mundo en modo festivo”, aseguró.
Turja contó que su padre fue quien lo introdujo al fútbol argentino luego de ver a Diego Maradona en el Mundial de 1986.
“Había pocos televisores a color en esa época en Bangladesh, cuando mi padre vio a Diego se hizo fanático”, contó el joven, y comentó que hoy en día tiene una foto de Messi en su escritorio.
“Casi nunca me pierdo un partido de Argentina, en Bangladesh amamos a Messi”, concluyó.