Un hombre de Texas llamado Terronce Morris, de 42 años, fue sentenciado a 57 meses (5 años) de cárcel por un elaborado plan de fraude en el que se hacía pasar por celebridades como Justin Bieber, Billie Eilish y Post Malone para estafar a organizadores de festivales de música.
Morris actuaba junto a su cómplice, Blake Kelly, de 37 años, quien también fue condenado a prisión. Ambos crearon una red de correos electrónicos y contratos falsos, falsificando las firmas de los artistas para concretar sus estafas. Incluso, en algunas ocasiones, contrataron a impostores para hacerse pasar por las celebridades.
El dúo operaba desde Missouri City, Texas, y logró estafar a varias personas por un total de cerca de 3 millones de dólares. Su modus operandi consistía en contactar a organizadores de festivales de música y ofrecerles la presentación de artistas de renombre como Justin Bieber, Billie Eilish o Post Malone. Para dar credibilidad a su oferta, falsificaban contratos y firmas, e incluso en algunos casos, contrataban a imitadores para que se hicieran pasar por los artistas en videollamadas con las víctimas.
El primer registro de su actividad fraudulenta data de entre diciembre de 2019 y marzo de 2020, cuando estafaron a una víctima por aproximadamente 1,3 millones de dólares. Luego, en octubre de 2020, repitieron el esquema con otra persona, obteniendo 500.000 dólares. Una tercera víctima también fue engañada por un monto de 250.000 dólares. Entre mayo de 2021 y diciembre de 2023, Morris estafó a dos víctimas más por un total de 850.000 dólares.
Los estafadores utilizaban el dinero obtenido para financiar un estilo de vida lujoso, incluyendo viajes, compras de artículos de alto valor, servicios exclusivos y cenas en restaurantes caros.
Morris y Kelly fueron finalmente descubiertos y arrestados. En febrero de 2024, Morris se declaró culpable de conspiración para cometer “fraude postal y electrónico, y robo de identidad agravado”. Su cómplice, Blake Kelly, ya había hecho lo propio un mes antes. Ambos estaban acusados de “falsificar y utilizar la firma de Justin Bieber en contratos de conciertos falsos y fraudulentos”.