España solicitó a Estados Unidos que inicie los procedimientos para el retiro de tierra contaminada con radiactividad luego que un choque en pleno vuelo liberó cuatro bombas de hidrógeno estadounidenses cerca de una aldea del sur de España hace casi 60 años, indicaron las autoridades españolas el lunes.
Ninguna de las bombas explotaron, pero los detonadores llenos de plutonio en dos de ellas se dispararon, esparciendo varios kilogramos (libras) de plutonio 239 altamente radiactivo en los alrededores de Palomares, informó la agencias Associated Press.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de España señaló que no se darán más detalles sobre la petición hasta que haya una respuesta oficial del Gobierno de Estados Unidos.
España y Estados Unidos firmaron una declaración de intenciones en 2015 al negociar un acuerdo vinculante para restaurar y limpiar el sitio de Palomares y planear el envío de la tierra contaminada a un lugar apropiado en Estados Unidos. Pero por varias razones nunca se firmó ningún acuerdo.
Las bombas cayeron el 17 de enero de 1966, cuando un bombardero B-52 de Estados Unidos y un avión de reabastecimiento de combustible chocaron en pleno vuelo, matando a siete de los 11 tripulantes. No hubo víctimas mortales en tierra.
El accidente ocurrió durante el apogeo de la Guerra Fría, cuando la política de Estados Unidos era mantener en el aire constantemente aviones de combate con armas nucleares cerca de la frontera soviética.
El comunicado de 2015 indicaba que inmediatamente después del accidente, ambos países se apresuraron a asegurar el área, retirar tierra contaminada y descontaminar el área. Desde entonces han estado monitoreando y analizando los niveles de contaminación.
El diario español El País, que publicó la historia sobre la petición el lunes, dijo que la solicitud se había presentado hace varios meses y que la reacción de Estados Unidos hasta ahora había sido positiva.