Miles de camioneros iniciaron este lunes 14 de noviembre una huelga indefinida en España debido a que aseguran que sus gastos superan sus ganancias. La movilización fue convocada por la misma plataforma detrás de la huelga que paralizó el país en marzo, la cual extraoficialmente representa a los camioneros autónomos y las pequeñas empresas.
Si bien la mayoría de los camioneros de España continuaron operando con normalidad y la Policía fue desplegada para garantizar que su trabajo no fuera interrumpido, el día comenzó con algunos incidentes menores. En Cantabria, seis camiones semirremolque fueron incendiados en la mañana. En Toledo, a algunos camiones les explotaron los neumáticos. Y en Cádiz, las autoridades dicen que los manifestantes iniciaron un pequeño incendio con neumáticos.
En Madrid, la Policía indicó que 3.000 manifestantes salieron a la calle para exigir mejores condiciones laborales para el sector del transporte, mientras que los organizadores dijeron que fueron hasta 8.000. Miguel Hernández, el hombre al frente de la huelga, advirtió que si el Gobierno no cede a sus demandas, “se avecina una Navidad muy oscura”.
Sin embargo, el Ministerio de Transporte y otras asociaciones de camioneros dicen que las recogidas y entregas continuaron con normalidad. ”Esto demuestra lo que venimos diciendo: que la mayoría del sector del transporte quiere trabajar y reconoce los avances que hemos hecho”, aseguró la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, a la emisora local La Sexta. “Pero estamos trabajando duro para seguir mejorando”, agregó. La principal demanda de los camioneros en huelga es que el Gobierno se asegure de que no pierden dinero cuando trabajan.
En agosto, esa demanda se convirtió en ley, pero los huelguistas señalan que no se ha hecho cumplir. Si bien el Gobierno no está negociando directamente con la plataforma no oficial, la ministra de Transporte Sánchez dijo que todo lo que los camioneros tienen que hacer es presentar quejas formales sobre las condiciones de trabajo para que se puedan desplegar inspectores.
En marzo, la huelga encabezada por la misma plataforma duró casi tres semanas. En ese momento, los supermercados finalmente se quedaron con estantes casi vacíos y pérdidas estimadas de 130 millones de euros diarios. Además, algunas fábricas se quedaron sin suministros y tuvieron que cerrar la producción por completo. La huelga de esta semana se lleva a cabo de cara a grandes eventos comerciales como el Viernes Negro y Navidad. Eduardo Irastorza, profesor de OBS Business School, estima que si se produjera una situación similar a la movilización anterior, la economía española podría perder 600 millones de euros diarios.
Estas protestas se suman a la ocurrida el día anterior, domingo 13 de noviembre, en las que más de 600.000 personas salieron a las calles en reclamo contra los recortes en la salud pública de la comunidad. La Unión Europea enfrenta una crisis histórica, con protestas en todos los países, debido a la fuerte suba de los precios de la energía y, por consiguiente, del costo de vida, por causa de las sanciones a Rusia y el envío de miles de millones de euros en armas a Ucrania.