El “premier” Boris Johnson ha declarado que no hay crisis de suministros y que las dificultades que están experimentando los británicos, con colas desde hace más de diez días ante las estaciones de carga de combustible, están vinculadas con “la reactivación de la economía”. Según publicó la BBC, extrayendo fragmentos de una entrevista con la Radio 4 de la misma cadena de noticias, Johnson llegó a proclamar incluso que el Reino Unido es “un gigante que está despertando”.
A pesar de ello, el líder tuvo que admitir que tan solo 127 camioneros de países de la Unión Europea han pedido visados para suplir los puestos vacantes de reparto, muy lejos de los planes para contratar 4.700 conductores durante este mes para aliviar la actual situación, que se refleja en la falta de combustible en las gasolineras y las estanterías vacías en los supermercados. Y esto ocurre luego de que los soldados del ejército hayan tenido que salir a realizar repartos por causa de esta situación.
El sector de transporte informó que se necesitan entre 50.000 y 100.000 puestos de trabajo para cubrir la demanda, y estos puestos fueron, en su mayoría, históricamente ocupados por inmigrantes de Europa del Este antes del Brexit y de la pandemia. Pero para Johnson, el escaso número de camioneros disponibles de la UE es una demostración de que “estamos ante una escasez global”.