El Gobierno de Guinea Ecuatorial, país de África central, enfrenta una polémica que resonó a nivel mundial luego de que se encontraran más de 400 videos sexuales en la computadora de un alto funcionario. La noticia sin precedentes provocó que el Ejecutivo ordene la instalación de cámaras de vigilancia en las oficinas gubernamentales y prohíba cualquier tipo de actividad sexual en sus instalaciones.
Las nuevas medidas fueron anunciadas por el vicepresidente Teodorín Nguema Obiang Mangue, hijo del presidente Teodoro Obiang, quien lleva más de cuatro décadas en el poder.
El hecho escandaloso salió a la luz el pasado 30 de octubre, cuando comenzaron a circular en redes sociales algunos de los videos explícitos protagonizados por Baltasar Ebang Engonga, director de la Agencia Nacional de Investigaciones Financieras de Guinea Ecuatorial.
Según afirmó el vicepresidente, Baltasar fue despedido de su función y ahora enfrenta una investigación penal. Los medios locales adelantaron que el material audiovisual muestra al funcionario en actos íntimos (sin protección) con esposas de autoridades civiles y militares, así como con otras mujeres célebres del país.
Cabe destacar que los 400 videos sexuales fueron descubiertos en su computadora en el curso de una investigación sobre presunta corrupción y malversación de fondos públicos.
Los videos filtrados en redes sociales muestran que las escenas fueron grabadas en las oficinas, baños públicos, hoteles locales e internacionales. El funcionario Engonga se encuentra en prisión preventiva por los delitos de corrupción, pero ahora tendrá que responder también a los videos encontrados.
Además, el fiscal general del caso anunció que se investiga “si el hombre utilizó deliberadamente estas relaciones para propagar una posible enfermedad entre la población”, por lo que podría ser acusado también de un delito contra la salud pública.
Cámaras de vigilancia y posibles despidos
Como se mencionó anteriormente, el vicepresidente Mangue indicó en sus redes sociales que la medida de instalar cámaras y prohibir el sexo en dependencias gubernamentales “busca erradicar conductas indebidas e ilícitas” y que “cualquiera que sea sorprendido teniendo cualquier tipo de actividad sexual en una oficina será despedido”.
“Se trata de mujeres casadas participando y grabándose en actos que están denigrando su reputación y dignidad. En nuestra posición de Gobierno, no podemos seguir viendo cómo se desmoronan las familias sin tomar ninguna disposición”, agregó el vicepresidente.