Una impactante historia conmocionó a Uganda, donde una mujer de 23 años enterró viva a su bebé recién nacida después de dar a luz en su casa. A pesar de haber estado seis horas bajo tierra, la pequeña logró sobrevivir.
Las autoridades policiales confirmaron que la joven tuvo el parto sin asistencia médica. El hecho ocurrió durante la noche, cuando la madre decidió enterrar a su hija en un jardín cercano a su domicilio.
La bebé permaneció enterrada hasta la mañana siguiente, cuando los familiares, al encontrar restos de sangre cerca de la casa, siguieron el rastro y descubrieron la “tumba”. La recién nacida fue hallada a las 11 de la mañana, lo que indica que estuvo seis horas bajo tierra.
Tras toparse con lo sucedido, los allegados a la joven alertaron a los servicios de emergencia. La asistencia llegó de inmediato al lugar y comenzaron la labor de remoción de tierra, encontrando a la niña aún unida a la placenta.
A pesar de su estado crítico, la bebé mostró signos de vida moviendo sus extremidades y respirando débilmente. Los presentes imaginaron que la recién nacida estaba muerta, ya que estaba llena de sangre, fría y su piel presentaba una coloración azul.
Tras ser rescatada, la niña fue trasladada de inmediato a un hospital, donde recibió atención médica para evaluar su estado de salud y prevenir infecciones. Al ser retirada su placenta y el cordón umbilical, la niña lloró suavemente.
Aunque presentaba cortes y moretones debido a su tiempo bajo tierra, no hubo afectaciones graves en sus órganos vitales. De igual modo, la víctima recibió ayuda mecánica para respirar.
Después de varios días en observación, la bebé logró respirar por sí misma y fue dada de alta para vivir con su abuela. Mientras tanto, la madre enfrenta cargos de infanticidio por sus acciones atroces.