El argentino Nicolás del Río, quien estaba desaparecido desde el pasado 22 de mayo en Italia, fue hallado muerto dentro de una casa. Por el presunto crimen, hay tres detenidos y dos sospechosos.
A principios de junio, se conoció la intensa búsqueda en el país europeo, ya que desde el 22 de mayo no había novedades respecto del paradero del camionero argentino. Aquel día, del Río debía transportar un cargamento con 300 bolsos de diseño de la empresa Amiata, valuado en 500 mil euros, pero los productos nunca llegaron a destino.
Este martes por la tarde, más de dos meses después de su desaparición, las autoridades confirmaron que Nicolás del Río fue encontrado muerto en la localidad italiana de Arcidosso. Ante el hallazgo, dos hombres de nacionalidad turca y uno de nacionalidad albanesa fueron detenidos. Al momento de declarar, los tres se negaron a hablar.
En cuanto a los dos sospechosos, la Justicia tiene en la mira a los padres del hombre de nacionalidad albanesa, ya que en su casa encontraron parte del cargamento que la víctima debía transportar.
Carolina Alegre, la esposa de Nicolás, habló con TN y expresó su angustia por la noticia: “Ni siquiera sabemos cuándo pasó, ni desde cuándo él estaba ahí, ni cómo fue, ni de qué forma”.
La mujer sostuvo que no hace responsables a los dueños de la empresa por la desaparición, sino que señala como culpables a los empleados de la fábrica de bolsos. “El hombre albanés trabajó muchos años en esa fábrica y sabía todos los movimientos. Lo habían echado por robarse carteras anteriormente”, detalló.
QUÉ PASÓ CON NICOLÁS DEL RÍO
Vivía en Siena con su pareja y su hijo de 9 años, se comunicó por última vez el 22 de mayo desde Castel del Piano. Estaba allí para recoger un cargamento de bolsos de diseño de la marca Amiata. La carga, que contenía al menos 300 piezas, desapareció junto con él.
Dos días después, su camioneta fue encontrada incendiada en Roccalbegna, provincia de Grosseto. Las cajas vacías fueron halladas a un kilómetro y medio de distancia. Ezequiel, su hermano, relató a TN que Nicolás fue visto por última vez cuando salía del lugar.
Además, dio dos detalles cruciales: una llamada sospechosa y el testimonio de un testigo. La última comunicación que tuvo fue con su jefe.
“Estaba haciendo un reparto y fue a buscar esta mercadería (las carteras de lujo). Al parecer, cuando salió del lugar lo cruzaron y hubo una llamada de por medio con el jefe medio rara. Un tal ‘Goni’ decía que lo conocía y necesitaba llevar unas cajas a un lugar que había cerrado hace un año y medio”, explicó Ezequiel.
Al parecer este hombre que lo interceptó mientras estaba en la camioneta, le pidió llevar una carga: “El jefe llamó al dueño de esa empresa y le dijo que habían cerrado”.
El segundo dato es la de un testigo que escuchó un disparo cuando Nicolás estaba en la zona, aunque “no se encontraron rastros de sangre ni documentación”. “No hay cámaras en el lugar donde lo cruzaron”, detalló.