La coalición de izquierda del presidente Gabriel Boric sufrió una derrota en las elecciones locales que finalizaron este domingo en Chile, pero la oposición de derecha obtuvo un triunfo menos holgado de lo esperado, de acuerdo a resultados parciales.
En unos inéditos comicios realizados en dos días y con voto obligatorio -considerados un barómetro de las presidenciales de 2025- el oficialismo perdía 40 alcaldías, mientras que la derecha tradicional sumaba 36.
La ultraderecha, consiguió sólo ocho municipios de los 345 en lisa, de acuerdo a los datos del Servicio Electoral (Servel), con el 84% de las mesas escrutadas.
Más de 15 millones de personas estaban habilitados para votar en estas elecciones. Además de alcaldes, se eligieron concejales, gobernadores regionales y consejeros regionales.
“En el global, el oficialismo perdió una cantidad importante de municipios a nivel nacional, aunque logró mantener municipios claves, como fue el caso de Maipú, en Santiago, con un contundente triunfo de Tomás Vodanovic”, dijo a la AFP Rodrigo Espinoza, analista de la Universidad Diego Portales.
Vodanovic, del Frente Amplio, fue reelecto con la mayor votación del país, con un 70%.
La derecha tradicional “sumó una importante cantidad de municipios, mientras que el Partido Republicano (ultraderecha) sumó ocho municipios, lo que estaba por debajo de las expectativas”, agregó.
Una de las derrotas más dolorosa para el gobierno de Boric se produjo en la comuna de Santiago, donde la comunista Irací Hassler perdió la reelección frente al derechista Mario Desbordes (exministro del segundo gobierno de Sebastián Piñera).
Las elecciones trasandinas estuvieron precedidas de una serie de escándalos de corrupción y abuso sexual que han sacudido a la sociedad chilena las últimas semanas.
Primero, el caso “Hermosilla” sobre la red de tráfico de influencias que montó el prestigioso abogado de las élites Luis Hermosilla y que impactó en la derecha tradicional por los vínculos que estableció con ese sector.
Luego, la denuncia de violación que derribó hace una semana a Manuel Monsalve, el hombre fuerte de seguridad del gobierno de Boric.
En las elecciones regionales de gobernadores, 11 de las 16 provincias se definirán en una segunda vuelta el próximo 24 de noviembre: ninguno de los candidatos logró más del 40 % de los votos en los comicios locales celebrados este fin de semana.
Sólo cinco regiones eligieron a sus gobernadores en primera vuelta: Tarapacá; Ñuble; Los Ríos, donde se impuso la izquierda oficialista; Aysén, donde ganó la derecha tradicional de Chile Vamos, y Magallanes, donde venció un candidato independiente cercano al Gobierno de Gabriel Boric.
En la región metropolitana de Santiago, el candidato oficialista Claudio Orrego Larraín se impuso con un 38,7% de los votos frente al candidato de la derecha tradicional, Francisco Orrego Gutiérrez, con un 27,8%.
En la región de Valparaíso, sede del Congreso y una de las más pobladas en el vecino país, el actual gobernador, el oficialista Rodrigo Mundaca, no consiguió revalidar el triunfo en primera vuelta que consiguió en 2021 y se medirá con María José Hoffman, exsecretaria ejecutiva de la Unión Demócrata Independiente (UDI), uno de los tres partidos que integran el bloque conservador Chile Vamos.