El 30 de marzo de 1981 ocurrió el intento de asesinato del presidente de los Estados Unidos, Ronald Reagan. Luego de 70 días de haber asumido el cargo de la presidencia, Reagan y otras tres personas recibieron disparos y fueron heridas por John W. Hinckley Jr.
En ese entonces, el simple ciudadano estadounidense adquirió fama luego de atentar sin éxito contra la vida del presidente, motivado por su obsesión y enamoramiento por la actriz Jodie Foster. Tras ello, el sujeto pasó 35 años internado en un centro psiquiátrico, quedando en libertad condicional en el 2016. Las autoridades determinaron que ya no representaba una amenaza ni para él mismo ni para la sociedad.
Luego de varios años de tal suceso, el nombre de Jhon Hinckley reapareció nuevamente tras la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales en Estados Unidos, llevadas a cabo el 5 de noviembre. Hinckley fue sorprendido en las redes sociales con numerosos mensajes polémicos que lo instaban a repetir su dramático acto de 1981 pero con el nuevo mandatario.
El extraño momento ocurrió cuando Hinckley compartió este miércoles en su cuenta de X un mensaje promocionando su sitio web de música y arte. Sin embargo, la publicación rápidamente se llenó de comentarios que le pedían que atentara contra Trump.
Debido al gran alcance que tomó la publicación y en medio de la polémica, las autoridades locales y federales comenzaron a investigar algunos de estos mensajes, según el portal TMZ.com.
“Te necesitamos más que nunca”, “Somos admiradores de tus primeros trabajos, deberías volver” o “¿Alguna vez piensas en cuánto mejor sería la sociedad si hubieras tenido éxito?” fueron algunos de los comentarios que John recibió en su perfil de X.
Ante la presión, el ex convicto se vio en la necesidad de expresar su postura y pidió a los usuarios que dejen de enviarle este tipo de comentarios. “¡Ahora soy un hombre de paz! ¡Por favor, dejen de hacer comentarios negativos!”, expresó a través de un nuevo tuit.
La publicación de Hinckley tuvo 1,3 millones de visualizaciones y más 23 mil “me gustas”. Los usuarios aprovecharon para dejar mensajes positivos, donde resaltó el siguiente: “La gente habla de preocuparse por la salud mental, pero bombardea a alguien con mensajes traumáticos. Solo les importan los ´me gusta´ en Internet”.