El accidente se produjo en la madrugada, cuando un grupo con 28 bomberos civiles realizaba un entrenamiento en la gruta Dos Bocas de la ciudad de Altinópolis, localizada a unos 360 kilómetros de la capital paulista, y parte de la caverna se desplomó, dejando una decena de personas atrapadas en su interior.
De acuerdo con el Cuerpo de Bomberos de Sao Paulo, una persona fue rescatada con vida e ingresada en un hospital de la región con múltiples fracturas y un cuadro de hipotermia, mientras que los otros nueve individuos atrapados, que todavía no fueron identificados, no resistieron a las heridas y fallecieron en el suceso. Cerca de 75 bomberos y socorristas trabajaron durante todo el día en las labores de búsqueda y rescate en el local de los hechos.
“El rescate es muy difícil por la condición. Es más de un kilómetro para llegar al local. Hubo un derrumbe de parte de la gruta y estamos trabajando con mucha cautela para preservar también las vidas de los equipos”, dijo a los periodistas el portavoz de la institución, el comandante Rodrigo Leal.
La Policía Militarizada informó además de que seis personas resultaron heridas cuando la gruta colapsó, pero no llegaron a ser enterradas y fueron trasladadas a centros de salud con heridas leves. La Gobernación de Sao Paulo, por su parte, desplazó a dos helicópteros y un grupo de especialistas en rescate para “reforzar los trabajos” de socorro.