Myles Harty, un joven de 20 años, falleció a raíz de un accidente automovilístico en Irlanda. Horas antes se iba a casar con su prometida, Kate Quilligan, quien decidió usar el vestido de novia para despedirse “por última vez” antes de su funeral.
Harty, oriundo de Limerick, Irlanda, falleció de manera instantánea cuando el auto en el que viajaba en el asiento delantero chocó contra un poste alrededor de la 1 de la mañana en Cragmore, informa el Irish Mirror.
Accidente y responsables
Un joven, quien creen que conducía el vehículo, fue arrestado bajo sospecha de haber cometido un delito en virtud de la Ley de Tráfico Vial local, y posteriormente puesto en libertad sin cargos.
Un tercer hombre, que viajaba en el asiento trasero del automóvil, un Skoda hatchback plateado, fue trasladado en ambulancia al Hospital Universitario de Limerick con lesiones “que no ponen en peligro su vida”.
Amor y homenaje
Tras el funeral llevado a cabo en la iglesia de St Mary, la desconsolada prometida de Harty, su familia y seres queridos enterraron a Myles.
En una publicación en las redes sociales , ella había jurado que ahora son marido y mujer.
En las imágenes se puede ver a Kate con un profundo dolor, escoltada por sus padres, con su vestido de novia y sosteniendo su ramo afuera de una casa. Además, una foto de Myles detrás de ella.
“Myles Harty, esto es lo que Kate quiso toda su vida. Se vistió y va a entrar contigo por última vez“, deslizó el padre, quien aseguró que perdurará en el recuerdo de todos.
Con el corazón destrozado, la imagen de Kate dejó a todos desconsolados. “Hoy es el día más difícil de mi vida. Pero sé que estarás conmigo en cada paso del camino. Realmente espero que sepas lo que pensé de ti”, escribió ella en homenaje a su amado “brownie”.
Advertencia por la seguridad vial
El párroco Sean O’Longhaigh advirtió a los jóvenes sobre el “peligro y los riesgos” asociados con la conducción.
“Quiero hacer un llamamiento a nuestros jóvenes, porque los accidentes son evitables; los coches son un regalo maravilloso, una gran comodidad, pero también son un arma letal”, sentenció a quienes acompañaban el dolor de la novia.
“Y entonces, la súplica, que estoy seguro de que muchos de los aquí presentes haríamos, es ser conscientes del peligro que se corre al volante de un automóvil”, concluyó.
La Policía que investiga el accidente fatal sigue en busca de testigos y cualquier video de cámara de tablero de vehículos en la carretera R518 Askeaton a Rathkeale.