Lisa LaFlamme, de 58 años y presentadora del canal televisivo CTV, tomó la decisión de no teñirse más el pelo luego de no poder asistir a la peluquería en tiempos de pandemia. Al hacerse público un video de ella donde aparecía con canas, desde la televisora le rescindieron su prestación de servicios.
A pesar de que el canal de noticias le pidió mantener en secreto tal decisión, la propia presentadora anunció su baja en un vídeo publicado en su cuenta de Twitter. “Si por un lado es devastador dejar CTV Noticias, que de alguna manera no es el resultado de mi elección, por el otro sabes que informarte ha sido el mayor honor de mi vida y te agradezco por estar siempre ahí”, comunicó a sus fieles espectadores.
Además, manifestó estar sorprendida y triste tras el aviso del canal, que según le notificaron, se debe a un intento de dar un giro a sus informativos. En un comunicado, Bell Media, propietaria de CTV, justificaron el despido alegando un cambio en los hábitos del espectador. Aunque no se manifestaron sobre el cambio de look de la conductora, por lo que actualmente están siendo cuestionados.
La cúpula de la emisora aseguró que es solo una “decisión comercial” seguir una “dirección diferente”. Y por consiguiente anunció el reemplazo de LaFlamme, el corresponsal de asuntos nacionales Omar Sachedina, de 39 años, cuya habilidad y diversidad (musulmán de familia india emigrada de Uganda) no fueron suficientes para calmar la polémica.
La sospecha de sexismo y discriminación por edad se cierne sobre la repentina destitución de Lisa LaFlamme de la televisora canadiense CTV. Los espectadores, los colegas de los medios y las celebridades culturales, como la ex cantante Anne Murray, condenaron la medida y hubo quienes preguntaron por el jefe de los gerentes de la emisora.
Experiencia y apariencia
La Flamme, fue galardonada este mismo año con el Canadian Screen Award como mejor presentadora nacional. Es la presentadora más popular del país y cubrió los principales eventos de su tiempo: elecciones, guerras y desastres naturales.
Luego de 35 años de servicios en la televisora canadiense CTV la obligan a dar un paso al costado. Parece contradictorio negar que tal decisión se debe a los años y apariencia de la conductora, por buscar nuevos aires en canal, cuando nunca apostaron a la capacidad de Lisa de poder reinventarse y así entender que los signos de la edad son solo una nueva faceta.
“Al final dije ¿Por qué preocuparse? Me vuelvo gris. Honestamente, si hubiera sabido que el encierro podría ser tan liberador en este frente, lo habría hecho mucho antes”, se dijo a sí misma en un especial de televisión.