Arqueólogos europeos hallaron esta semana una espada de bronce de 3.000 años de antigüedad. El descubrimiento se dio durante unas excavaciones en la ciudad de Nördlingen, en el sur de Alemania, aunque el anuncio de tal hallazgo recién fue oficializado este viernes por la Oficina Estatal para la Preservación de Monumentos Históricos.
Se trata de una arma octogonal, con una empuñadura también octogonal hecha enteramente de bronce. Según una clasificación preliminar, la espada data de finales del siglo XIV a.C. y, por tanto, de la Edad de Bronce Media. Aun así, la entidad declaró en un comunicado: “Los hallazgos de espadas de este periodo ya son raros de por sí”.
Cabe destacar que el arma blanca fue encontrada en una tumba con abundantes objetos de bronce. Además, dentro de la fosa fueron enterrados un hombre, una mujer y un joven. Sin embargo, los arqueólogos no están seguros de si los tres estaban relacionados.
La extrañeza de estos hallazgos y lo encontrado en la tumba solo plantea más dudas sobre el origen de la espada. Los investigadores conocen solamente dos zonas en las que se fabrican espadas octogonales en Alemania.
Una de ellas, local, estaba en el sur del país, mientras que la otra procedía del norte de Alemania y Dinamarca. A pesar de esta información, los investigadores necesitan realizar mayores estudios para determinar dónde fue fundida.
Además, para añadir más complejidad a la pesquisa, una comparación de las técnicas de fundición y la decoración demostró que algunas de las espadas octogonales del norte son aparentemente réplicas de las formas del sur de Alemania, mientras que otras piezas podrían ser importaciones genuinas.
Mathias Pfeil, jefe de la Oficina Estatal de Protección de Monumentos de Baviera aclaró: “Todavía hay que examinar la espada y el enterramiento para que nuestros arqueólogos puedan clasificar este hallazgo con mayor precisión”. Y agregó: “Pero ya se puede decir que su estado es excepcional. Un hallazgo así es muy raro”.
Por su parte, el sitio de noticias latinoamericano del National Geographic, consignó que el valor de la espada hallada radica en su empuñadura, muy elaborada y perfectamente conservada. Se fabricó fundiendo la empuñadura directamente sobre la hoja, técnica conocida como sobrefundido, y luego realizando la decoración usando punzones.
Está tan bien conservada que “casi sigue brillando”, destacaron desde el sitio anteriormente mencionado en base a las palabras de las autoridades locales. Si bien es inusual encontrar espadas de ese periodo, la oficina estatal informó también que en el pasado se recuperaron una serie de elementos de la misma índole.