Una joven madre se llevó una desagradable sorpresa luego de comprarle a su bebé un juguete que a simple vista parecía simpático y enternecedor cactus que bailaba. Sin embargo, la música incorporada en el dispositivo inducía a prácticas peligrosas.
Dicho juguete rápidamente se convirtió en motivo de discusión y controversia en Taiwán, lugar en donde se detectó por primera vez el mensaje oculto detrás del objeto. Básicamente se trata de un cactus con dos simpáticos ojos y colocado en una maceta, el que suele tener distintas presentaciones que van a variar según la indumentaria que le coloque el fabricante.
Algunos están diseñados con estilo mexicano, otros parecen cowboys y también están los que vienen sin ‘agregados’. Peor lo más curioso del alegre personaje es la canción que trae incorporada y que baila: es un tema de estilo pop electrónico cuya letra no está en inglés ni en idiomas orientales, sino en polaco.
Cuando lo tradujeron, se produjo el escándalo: el tema habla de la cocaína y de su consumo. “Solo tengo una cosa en mi mente, cinco gramos de coca se van volando solos”, dice la canción.
“Al mundo del olvido, tengo pensamiento en mi cabeza. Cuando esta condición termine, cuando ya no esté solo”, sigue el tema. El caso se dio a conocer luego de que una mujer polaca que vive en Taichung vio el juguete en un Carrefour y al escuchar la letra entendió el contenido explícito de la letra.
Esta mujer se contactó con una amiga polaca también residente en el mismo lugar y ambas denunciaron el caso en la prensa local. Además de advertir sobre la apología del consumo de cocaína, las europeas aseguraron que la canción hacía alusión de forma reiterada al suicidio: “La cocaína y el intento de suicidio se repiten una y otra vez. Es realmente impactante”, afirmó una de ellas.
Al tomar estado público, el fabricante del juguete se limitó a decir que el cactus danzante puede ayudar a estimular la imaginación y la creatividad en los niños.