Una empresa estadounidense se lanzó a la conquista de los cielos a través del desarrollo de aviones supersónicos, los que buscan ocupar el espacio vacío dejado tras la salida de servicio del famoso Concorde.
Se trata de la firma estadounidense Spike Aerospace, que lleva adelante la producción de un jet de negocios supersónico llamado Spike S-512, una nave que se desarrolla con el objetivo de recorrer la distancia entre Nueva York y Londres en tres horas y 15 minutos.
Se espera que el avión futuristas entre en servicio en el año 2028 alcanzará Mach 1,6, lo que significa que puede llegar a los 1.770 kilómetros por hora.
No obstante, entre los planes de Spike Aerospace para la próxima década está en alcanzar la velocidad de Mach 3,2, lo que significa que el tiempo para recorrer ambas ciudades podrá reducirse a una hora y media.
Si bien los precios de los billetes para vuelos comerciales operados por este avión supersónico comenzarán siendo altos, se cree que irán bajando de forma gradual hasta llegar, aproximadamente, al costo de un asiento en clase preferente de un vuelo regular actual.