Lo conocen paradójicamente como “El Rusito”, pero en realidad nació en Ucrania. Emigró junto a su familia a la Argentina para radicarse en Mar del Plata cuando apenas era un niño. En ese entonces nadie sospechaba que su interés y fanatismo por el material bélico de la Segunda Guerra Mundial lo convertiría en un fanático de Adolf Hitler.
Oleksandr Levchenko, el protagonista de esta historia, pasó de ser un pequeño extranjero a un peligroso “skinhead” neonazi capaz de cometer atroces crímenes, que cubrieron la portada de todos los medios nacionales en 2013. En ese momento, comenzaron a conocerse los ataques que, con tan solo 18 años, realizaba a mujeres y jóvenes de la ciudad.
Uno de los hechos más notorio cometidos por “La Banda del Rusito” fue la brutal golpiza a Astrid, una mujer transexual, a quien él junto a los jóvenes de su banda desnudaron y le destrozaron la mandíbula con una piedra, detalla Infocielo.
Por este y otros delitos que incluyen brutales golpizas y vandalismo nazi, el Tribunal Federal de Mar del Plata lo condenó en 2018 a 9 años y 6 meses de prisión, que cumplía en el penal de Marcos Paz hasta que, a pedido de él mismo, la Justicia argentina ordenó extraditarlo a su país natal, Ucrania, en marzo de 2021. La Dirección Nacional de Migraciones hizo efectiva el “extrañamiento” a mitad del año pasado.
La extradición llegaría pocos meses antes de que escalen las hostilidades entre Rusia y Ucrania. Con el inicio de la guerra, Levchenko pasó de criminal a soldado.
“Saludos compa. Va a salir todo bien. Vamos a vencer. Abrazo para los pibes”, dice Levchenko en un video que grabó en modo “selfie”, le envió a conocidos en Mar del Plata, y que publicó el portal local 0223. Se lo puede ver armado, con buzo táctico de camuflaje y un gorro de lana con la bandera de Ucrania. Dientes apretados y media sonrisa completan el rostro del criminal expatriado, que parece cumplir el sueño de combatir en una guerra y dar rienda suelta de manera legal a su violencia y agresividad.
Mientras las tropas rusas avanzan en terreno ucraniano y están cerca de tomar la capital, Kiev, Vladimir Putin llamó a las fuerzas armadas del enemigo a que derroquen al presidente Volodímir Zelenski y sus funcionarios y tomen el poder, para negociar la paz.
“No permitan que los neonazis y banderovsti tomen a sus hijos, esposas y ancianos como escudos humanos. Va a ser más sencillo para nosotros estar de acuerdo, que con esta pandilla de drogadictos y neonazis que se establecieron en Kiev y tomaron como rehén a todo el pueblo ucraniano”, pidió Putin.