Este jueves, los Emiratos Árabes Unidos inauguraron en Dubái la Expo 2020. Se trata de la primera exposición universal que se celebra en Medio Oriente y que ha paso a convertirse en el mayor acontecimiento a nivel mundial, desde que empezó la pandemia del covid-19.
Quien inauguró oficialmente el evento fue el joven príncipe heredero de Dubái, el jeque Hamdan bin Mohammed, que dio la apertura oficial del evento que tiene un coste de 7.000 millones de dólares.
“El mundo entero se reúne en Emiratos Árabes Unidos mientras inauguramos juntos la Expo 2020 de Dubái con la bendición de Alá”, dijo el jeque Hamdan antes de que comenzaran los festejos.
Proyecciones y efectos luminosos iluminaron la plaza Al Wasl, un recinto abovedado futurista, símbolo de la arquitectura islámica. También hubo varios conciertos, entre ellos los de la famosa diva emiratí Ahlam y la cantante británica Ellie Goulding.
El pianista chino Lang Lang también estaba entre los artistas invitados, al igual que el tenor italiano Andrea Bocelli, que cerró el espectáculo ante los dirigentes emiratíes.
Postergada el año pasado a causa de la crisis sanitaria, la exposición estará abierta al público a partir del viernes, en medio del desierto a las afueras de Dubái, la ciudad de los rascacielos y el lujo.
De qué se trata
La exposición revelará maravillas arquitectónicas e innovaciones tecnológicas de los más de 190 países representados en sus pabellones.
La primera Exposición Universal se celebró en 1851 en Londres, en el Crystal Palace, una estructura creada para la ocasión. Y en París, la de 1889, presentó al mundo la icónica Torre Eiffel.
Esta Expo 2020 emiratí promete convertirse en el evento más grande jamás visto en Oriente Medio, en el año previo a la Copa del Mundo de fútbol, que se celebrará en su rico vecino Catar.
Dubái espera a unos 25 millones de visitantes durante los próximos seis meses porque, a diferencia de Japón, que prohibió la presencia de público durante los Juegos Olímpicos de Tokio, ella abre sus puertas de par en par a los turistas extranjeros siempre que lleven mascarilla y respeten el distanciamiento social.
Todos los visitantes deberán estar vacunados o, en su defecto, mostrar una prueba PCR negativa muy reciente. Emiratos figura entre los países que más rápido vacunaron a la población, con casi 20 millones de dosis para 10 millones de habitantes.
La Expo 2020 revela las grandes ambiciones de Dubái, que encadena los récords para atraer la atención mediática y sobre todo a los turistas. Su torre Burj Jalifa por ejemplo es, con sus 828 metros, la más alta del mundo.
Gracias al retraso provocado por la pandemia, el país podrá celebrar el 2 de diciembre, en plena Expo 2020, el 50º aniversario de la creación de esta federación de siete emiratos, cuya capital es Abu Dabi.
Entre las muchas atracciones previstas figuran los basquetbolistas Harlem Globetrotters y un robot panda chino. Los aficionados a los viajes futuristas podrán montar en una cabina ‘Hyperloop’ (que se desplaza a gran velocidad en un tubo) y los amantes de la historia admirarán un antiguo sarcófago en el pabellón egipcio.
China alardea de disponer de uno de los pabellones más grandes, con forma de bulbo, mientras Marruecos ha construido el suyo sobre la tierra por razones medioambientales. Los holandeses cuentan con una pirámide cubierta de plantas comestibles e irrigadas por agua de lluvia solar.
La mayoría de los Estados europeos participan en este evento, pese a que el Europarlamento pidió que se boicoteara “para demostrar su rechazo a las violaciones de los derechos humanos en Emiratos”.
Las oenegés suelen criticar al país por violar la libertad de expresión y las condiciones de los trabajadores extranjeros, como aquellos que participaron en la construcción del recinto de la Expo 2020.