Hasta 10 personas podrían estar sepultadas bajo los restos de un edificio que se derrumbó tras una explosión en la ciudad de Marsella, en Francia. Un incendio entre los escombros complica los labores de rescate, indicó el domingo el ministro francés del Interior.
Las autoridades determinaron que al menos cuatro personas vivían en el edificio, explicó el ministro del Interior, Gerald Darmanin. Se desconoce si alguien murió durante el derrumbe o la explosión y qué habría provocado el siniestro, señaló. Además, agregó que unos 30 edificios de la zona fueron evacuados.
Darmanin, que visitó el lugar, informó sobre el suceso 11 horas después de que el edificio de cinco plantas se viniera abajo poco antes de la una de la madrugada. Más de 100 bomberos, con ayuda de especialistas, trabajaron toda la noche para acceder y extinguir las llamas, que según el ministro, ardía a unos pocos metros (pies) por debajo de los escombros.
El derrumbe, que resonó en los barrios cercanos, ocurrió en una calle estrecha en el centro de Marsella, lo que aumentó las dificultades para bomberos y rescatistas, informó la agencia de noticias AP.
El intenso calor impidió enviar equipos de perros de búsqueda y, según algunos medios locales, se estaba preparando el despliegue de robots.
Dos edificios contiguos sufrieron derrumbes parciales antes de que uno -que estaba entre los inmuebles evacuados- se cayera más tarde, explicó el alcalde de Marsella, Benoit Payan, lo que creaba un desafío adicional. Seis personas fueron hospitalizadas.
“Los bomberos miden minuto a minuto la mejor forma de apagar el fuego”, dijo el alcalde en una conferencia de prensa televisada. “Las vidas de los bomberos también están en juego, debemos prepararnos para tener víctimas” advirtió.
“Intentamos sofocar las llamas al tiempo que preservamos las vidas de las posibles víctimas bajo los escombros”, dijo Lionel Mathieu, comandante de la brigada de bomberos de Marsella.
El alcalde dijo que la causa “probable” del siniestro era una explosión, aunque recalcó que no debían “sacarse conclusiones” sin una investigación. El edificio afectado está ubicado en un barrio antiguo de la segunda ciudad más grande de Francia. Las calles cercanas quedaron cortadas.
