Un grupo de científicos recreó el rostro de Amenhotep I, el faraón que fundó el Valle de los Reyes y dejó un enorme legado en la historia del antiguo Egipto. Este faraón, quien gobernó durante la XVIII Dinastía, falleció hace 3500 años a la edad de 35 años y fue preservado mediante la técnica de la momificación.
Amenhotep fue el primer faraón enterrado en el Valle de los Reyes, un sitio donde descansan muchos reyes de las dinastías XVIII, XIX y XX. Su reinado trajo paz y prosperidad, lo que llevó a que fuese adorado como una deidad. Según informó el Daily Mail fue Cícero Moraes, diseñador brasilero especializado en reconstrucción facial forense 3D, quién se encargó de recrear su rostro usando diversos métodos.
Uno de estos métodos distribuyó marcadores de espesor de tejido sobre el cráneo del faraón, guiados por tomografías computarizadas de donantes vivos. Otro se basó en una técnica de deformación anatómica, ajustando una cabeza digital de un donante hasta hacerla coincidir con el cráneo de Amenhotep. Este trabajo se facilitó con las tomografías del cráneo de Amenhotep tomadas en 2021 por Sahar N. Saleem y Zahi Hawass.
Las tomografías revelaron detalles de su apariencia física y algunos órganos internos, aunque no se identificó una causa exacta de muerte. Se estima que Amenhotep medía 1.5 metros, tenía dientes en buenas condiciones y el cabello rizado.
El arqueólogo Michael Habicht, colaborador de Moraes, añadió que Amenhotep presentaba algunas deformaciones faciales no reflejadas en las estatuas de la época. Afirmó que las estatuas eran más estilizadas, con una proyección mayor en el mentón. Durante el reinado de Amenhotep, el país experimentó estabilidad tras la expulsión de los hicsos y la reunificación del territorio por su padre, Ahmosis I. También supervisó importantes construcciones religiosas y campañas militares en Libia y el norte de Sudán. Según Habicht, su gobierno pacífico inició el auge del Imperio Nuevo.