Chile tiene la posibilidad de anotar su nombre en la exclusiva lista de países que han llegado a la Luna. Este hito para el territorio vecino sería gracias a una participación en un proyecto espacial de Israel. De concretarse la misión, también lograría ser el segundo país en llegar al lado más lejano, el oscuro, de nuestro satélite.
Se trata Beresheet 2, un proyecto de la ONG israelí SpaceIL que tiene el objetivo de lanzar una nave espacial para que no solo orbite la Luna, sino también conseguir alunizar.
La misión cuenta con el apoyo de la NASA, de la Agencia Espacial de Alemania y de los Emiratos Árabes Unidos. Además, existen conversaciones con Australia, Francia, Marruecos, Suecia y Suiza para que ingresen al nivel educativo o científico del proyecto. Para expandir las colaboraciones, el equipo de SpaceIL pensó en una alianza en el hemisferio sur, y puso sus ojos en Chile, detalla TN.
El país trasandino es tenido en cuenta debido a su desarrollo institucional y académico, además de conocimientos sobre temas del espacio, gracias al exitoso Programa Satelital de Chile.
“La nación aportaría el 12,5% del presupuesto (unos 15 millones de dólares) y toda la tecnología sería israelí”, explicó a TN, José Maza, astrónomo chileno.
Según informó el medio local La Tercera, Chile aportará además cuatro a cinco ingenieros que colaborarán en el diseño, la arquitectura y la ejecución del proyecto. Así, una de las naves llevaría la bandera de Chile.
Por su parte, Shimon Sarid, CEO de SpaceIL, explicó que eligieron a Chile por distintas razones. “El país ya posee un programa espacial y tiene intenciones de mejorar sus capacidades aéreas”. Por otra parte, el israelí destacó la cooperación internacional entre ambas naciones hace décadas. Y además argumentó que Chile es líder regional en materia de espacio y uno de los más avanzados en el hemisferio sur.
Es por esto que la decisión de colaborar ahora depende de Chile y tiene tiempo para responder hasta fines de mayo. Por el momento, y si no hay demoras, el lanzamiento de la nave está previsto entre junio y agosto de 2025.