Investigadores del caso por la desaparición de Madeleine McCann aseguran haber encontrado “pruebas impactantes” que podrían conducir a la verdad sobre lo ocurrido el 3 de mayo de 2007 en Portugal.
Según explicaron, la nueva evidencia confirmaría que Christian Brueckner -principal sospechoso - fue el responsable de su desaparición.
El diario británico The Sun informó que el equipo de documentalistas del canal Sat.1, que trabaja en un proyecto sobre la niña, está conformado por ex-investigadores y periodistas.
Dicho equipo asegura tener “muchas nuevas pistas e indicios” de que Brueckner estaba detrás del rapto de la pequeña niña británica. Ellos afirman que el alemán, con antecedentes de pedofilia, estaba en Praia da Luz, Algarve, Portugal, muy cerca del lugar donde desapareció la niña aquella noche.
“La triste historia de Madeleine McCann es una historia que tiene muchos capítulos alemanes. El caso se está juzgando en el Tribunal Regional de Braunschweig, ya que el alemán Christian B. es el principal sospechoso. En su entorno hay muchas mujeres y hombres alemanes que pueden describir detalles individuales en torno al crimen”, dijo Juliane Ebling, editor en jefe.
“Jutta Rabe -la periodista alemana de larga trayectoria y responsable del documental- ha investigado en los últimos meses material impactante en Alemania, Portugal e Inglaterra, que incrimina fuertemente a Christian B.”, agregó.
Quien es el principal sospechoso de la desaparición de Madeleine McCann
Christian Brueckner posee un amplio historial delictivo, con unos 17 casos de agresiones, abusos, robos o asuntos relacionados con drogas. Su primer juicio por un delito sexual fue en 1994, cuando tenía 17 años, en el que fue condenado en Baviera por abusar de un niño.
Actualmente, Brueckner está en la cárcel de Oldenburg, cerca de Bremen, por una condena que corresponde a una violación cometida en 2005 en Portugal, cuya víctima fue una mujer estadounidense de 72 años a la que ató, pegó, agredió sexualmente y finalmente robó.
Cómo permaneció libre durante años, el alemán fue visto en el área alrededor del complejo de Praia da Luz, en la costa del Algarve, en los días y semanas previos a la desaparición de Madeleine el 3 de mayo de 2007.
El último caso relacionado con menores relacionado con Brueckner fue un proceso por tenencia de pornografía infantil, en 2016.
Una vez asociado al caso de Maddie McCann se revelaron otros detalles acerca del pedófilo alemán. Por ejemplo, un motorhome Tiffin Allegro, de unos 10 metros de largo y 30 años de antigüedad, que había sido hallado en 2016 por la Policía de Alemania en una fábrica de cajas abandonadas en Neuwegersleben, al norte de ese país.
En aquel entonces, los investigadores estaban detrás de la búsqueda de Inga Gehricke, una nena de 5 años que estaba desaparecida. Los conocidos del sospechoso afirmaron que Brueckner se refería a su vehículo como un lugar para “esconder drogas y niños”.
Durante una inspección detallada del vehículo que se prolongó por seis días, los detectives encontraron mucha ropa de niños, en su mayoría, trajes de baño, que fueron mostrados por TV. Como Brueckner nunca tuvo hijos, es un indicio claro de su perversión hacia los menores.
La Policía también encontró en ese momento seis memorias USB con más de 8.000 archivos con fotos y videos de abusos sexuales de menores. Tras ese episodio, Brueckner fue condenado por posesión de pornografía infantil, pero no se le halló ningún vínculo con la desaparición de la pequeña Inga.