La campaña de vacunación contra el coronavirus en Estados Unidos avanza a un paso increíble, motivada por el stock de vacunas pero también porque los distintos involucrados recurren a incentivos por demás llamativos para tentar a que la población acuda masivamente a inocularse.
Desde la entrega de dinero, el otorgamiento de becas o cerveza, hasta corte de pelos gratuitos, quienes diseñan las estrategias de convencimiento recurren a cualquier fomento para que los inoculantes lleguen a todos.
En este marco, el estado de Washington, en EE.UU., el comité de licor y cannabis anunció la autorización para que los centros de venta de marihuana –son legales- a regalar cigarrillos de marihuana a los adultos que reciban su vacuna en estos centros.
En dicho estado, los centros de vacunación también fueron montados en los comercios que se dedican a la venta de cannabis. Debido a esto, es que las autoridades gubernamentales creen oportuno ofrecer un porro a cada mayor de edad que concurra para recibir el inoculante y desee llevarse un cigarrillo.
Para ser acreedor del beneficio, el interesado debe ir con o sin turno a dichos establecimientos habilitados para comercializar marihuana y que cuenten con el vacunatorio. Tras recibir la inyección, quien así lo desee solo debe pedir el narcótico; eso sí, debe tener más de 21 años.
La campaña estatal fue llamada Joints for Jabs -cigarrillos por inyecciones- y busca cumplir con la meta que estableció el presidente Joe Biden de alcanzar el 70% de su población vacunada para el 4 de julio-.