La científica del Instituto de Virología de Wuhan, Shi Zhengli, reapareció y habló sobre las investigaciones que se llevan adelante para determinar el origen del coronavirus y que buscan determinar si la propagación del patógeno se originó en dicho instituto.
Ante los crecientes rumores y las presiones insistentes de EE.UU., Zhengli afirmó que los científicos de dicha institución son inocentes y buscó desligar a sus colegas de cualquier posible negligencia o conspiración.
Zhengli señaló en una entrevista al New York Times que no hay pruebas y lamentó la suciedad que se está vertiendo “sobre científicos inocentes”.
“¿Cómo carajo voy a ofrecer pruebas de algo de lo que no hay pruebas?”, declaró con bronca ante la consulta sobre la posible filtración del virus al exterior desde el laboratorio. “No sé cómo el mundo ha llegado a esto, vertiendo constantemente porquería sobre científicos inocente”, aseguró.
En un artículo publicado en marzo de 2020 en Scientific American, Shi Zhengli afirmó que el código genético del virus que causa la COVID no coincide con ninguna de las muestras de su laboratorio.
También dijo al equipo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que visitó China para averiguar el origen del coronavirus, que todo el personal había dado negativo en las pruebas de anticuerpos del Covid-19, según lo detalla Clarín.
El resurgimiento de la teoría que plantea el inicio de la pandemia en el laboratorio
La llegada de Joe Biden al poder en Estados Unidos supuso un giro en múltiples aspectos de la política local e internacional de la superpotencia. Una de ellas fue el intento por determinar el origen del Covid-19 y su posible vinculación con la fuga de un laboratorio chino.
En este marco, Biden ordenó el mes pasado a las agencias de inteligencia que investigaran el origen del virus, sobre todo la hipótesis de la filtración desde una instalación científica en Wuhan hacia el exterior.
Estos contagios habrían sucedido después de visitar una cueva de murciélagos en la provincia sur occidental china de Yunnan.
Pero también existe una línea de investigación sobre un posible contagio accidental que apunta al presunto contagio de trabajadores del Instituto de Virología de Wuhan, quienes habrían enfermado en 2019 tras visitar una cueva de murciélagos en la provincia sur occidental china de Yunnan.
