En las últimas horas, las autoridades de Brasil confirmaron que superaron las 300 mil muertes por coronavirus desde que inició la pandemia. Este mes de marzo ya batió todos los récords en una brutal segunda ola.
El ministerio de Salud notificó 2.009 decesos en las últimas 24 horas, con lo cual el balance se eleva a 300.685 fallecidos, superado solo por Estados Unidos. El total de infectados en trece meses de pandemia llega a 12,2 millones.
El país sudamericano, de 212 millones de habitantes, se ha convertido en una fuente de preocupación mundial, debido a la falta de coordinación de sus políticas sanitarias y al surgimiento de una variante local del virus, denominada P1, considerado mucho más contagiosa.
Brasil registró el martes por primera vez más de 3.000 muertos en 24 horas y el promedio de decesos diarios es de 2.273, más del triple que a inicios de año (703).
El mes de marzo, con 45.773 óbitos declarados, ya se ha convertido en el más letal. El récord anterior databa de julio de 2020 (32.881), en el auge de la primera ola.
La escalada por el momento parece no tener techo, con la vacunación que avanza a pasos lentos, y las resistencias del presidente, Jair Bolsonaro, a imponer medidas de confinamiento social, alegando su impacto económico.
Las unidades de cuidados intensivos de la mayoría de los estados están al borde del colapso y en muchos se señalan el riesgo de ruptura del abastecimiento de tubos de oxígeno.
Algunos estados, como Sao Paulo y Rio de Janeiro, decidieron adelantar feriados y crear otros a lo largo de toda la semana próxima para reducir la movilidad social que favorece la transmisión del virus.