Nuevamente la NASA se ve obligada a retrasar su programa Lunar tripulado consecuencia de la pandemia de coronavirus, retrasos en el desarrollo de la tecnología pero también por problemas judiciales que enfrenta la agencia aeroespacial con Blue Origin por no otorgarle contratos.
La empresa de Jeff Bezos protestó porque la NASA concedió “a dedo” el contrato para esa misión lunar a SpaceX. Finalmente, la NASA ha desestimado esa protesta y seguirá con su plan inicial, pero esta decisión ha obligado a retrasar esa vuelta del hombre a la Luna hasta al menos 2025.
La NASA optó por seguir un programa que mezcla la presencia estatal pero también empresas privadas como Boeing, Space X o Blue Origin. Mientras que la empresa de Elon Musk recibió casi 3 millones de dólares para desarrollar el módulo de aterrizaje, Blue Origin no recibió nada. Esto provocó una demanda judicial en la justicia federal de ese país, por lo que el administrador de la NASA reajustó la nueva fecha de la llegada de los hombre a la Luna para el 2025.
El objetivo de 2024 fue propuesto por el entonces presidente Trump y se esperaba que viajaran la primera mujer y el primer hombre de color.