El exprimer ministro italiano Silvio Berlusconi, de 83 años, fue dado hoy de alta tras estar diez días internado por coronavirus, lo que calificó como “la prueba más peligrosa” de su vida.
“Debo agradecer a todo el personal médico por haber superado la que considero la prueba más peligrosa de mi vida. Es una enfermedad grave y peligrosa”, dijo Berlusconi al salir del Hospital San Rafael de Milán, donde había sido ingresado la noche del 3 de septiembre por una neumonía bilateral producto de la Covid-19.
“Cada uno de nosotros está expuesto al riesgo de contagiar a otros, renuevo a todos el pedido para la máxima responsabilidad personal y social”, señaló el premier en 1994-1995, 2001-2006 y 2008-2011, al leer una declaración en la puerta del Hospital.
“La carga viral de mi test había sido la más alta de las decenas de miles observadas en el San Rafael”, reveló Berlusconi, que agradeció el trabajo del equipo médico del lugar.
Según informó luego su médico personal Alberto Zangrillo a la cadena Rai, Berlusconi terminará el tratamiento con aislamiento en su residencia de Árcore hasta dar negativo en dos test consecutivos.
Considerado paciente de riesgo por su propio médico a partir de su edad y de las patologías previas que tuvo, el fundador y líder del partido derechista Fuerza Italia fue operado en 2019 por un problema intestinal, y en 2016 fue intervenido a corazón abierto.
En 2006, además, había sido intervenido en una clínica de Cleveland, en Estados Unidos, donde se le implantó un marcapasos.
Además del exdueño del club Milán de Italia, también habían dado positivo en coronavirus su pareja, Marta Fascina, y tres de sus hijos, Luigi, Marina y Bárbara.