Júpiter y Saturno regalaron uno de los momentos más bellos en el cielo –y en medio de un turbulento año-, lograron que miles de personas dejaran de pensar en la pandemia o en la economía y se dispusieran a disfrutar de un espectáculo único.
Ambos gigantes del sistema solar se unieron en el firmamento durante este 21 de diciembre y exhibieron el fenómeno conocido como “Estrella de Navidad” o “Estrella de Belén”. El mismo es tan y que no volverá a producirse en estas condiciones hasta dentro de 6 décadas.
Ambos planetas aparecieron en el cielo hacia el oeste apenas cayó el sol, y conforme pasaban los minutos comenzaron a hacerse más nítidos: parecían dos grandes estrellas muy próximas, pero con la diferencia que la luz que emitieron no es propia sino que era el reflejo del sol, por lo cual no parpadeaban.
A simple vista Júpiter y Saturno parecían tocarse desde el punto de vista de la Tierra, pero en realidad ambos se ubicaron a millones de kilómetros entre ellos.
Quienes pudieron verlos desde telescopios o herramientas de amplificación pudieron contemplar al gigante gaseoso y por detrás a Saturno con sus clásicos anillos.
Pero si por alguna circunstancia algún curioso se perdió semejante evento no hay que desesperar, ya que el mismo volverá a producirse en 2080.