Un pastor anunció que cuando él falleciera iba a resucitar a los 3 días, como cuenta la Biblia que sucedió con Jesús, y tras su muerte, decenas de fieles se mantuvieron en vilo al lado del cajón destapado esperando el milagro, pero pasadas las 72 horas no ocurrió, el hombre siguió muerte y la municipalidad les pidió enterrarlo.
El hecho ocurrió en en Goiatuba, en el estado de Goias, Brasil. Allí, el pastor tenía su iglesia evangelista, con decenas de feligreses y era popular entre los mismos. Pero luego falleció y su esposa anunció que el marido había dejado un escrito en el que pedía que no se inhume el cuerpo sino hasta cumplidos los tres días de su deceso, porque iba a resucitar.
Con permiso de la municipalidad, la viuda y los fieles lo velaron en el cementerio a cajón abierto, para el momento en que despertara volviendo de la muerte.
Y así, los feligreses convencidos de que su pastor resucitaría como Jesús esperaron en silencio al lado del féretro.
Pasadas las 72 horas, el milagro no sucedió, el pastor siguió muerto y las autoridades del municipio de Goiatuba le exigieron a la familia del difunto que sellaran el cajón, para darle finalmente la santa sepultura como correspondía. Finalmente su cuerpo fue enterrado.