Un megaoperativo policial llevada a cabo en diversas favelas de Río de Janeiro este martes resultó en al menos siete muertos en enfrentamientos con presuntos delincuentes, según informaron las autoridades. El operativo, que comenzó en la madrugada, se desarrolló simultáneamente en varias favelas del norte de Río, incluyendo Complexo da Maré, do Alemão y da Penha.
La Policía Militar del estado de Río indicó en la red social X que siete delincuentes perdieron la vida en los enfrentamientos, durante los cuales se incautaron cinco fusiles, tres pistolas, siete radios y estupefacientes, cuya cantidad se está contabilizando. Además, tres sospechosos resultaron heridos, dos fueron detenidos, y dos policías terminaron con heridas en la operación.
La acción conjunta involucró a agentes de las policías civil y militar y tenía como objetivo capturar a miembros del Comando Vermelho, una de las mayores organizaciones criminales de Brasil dedicada al narcotráfico.
“Policías civiles (...) realizan una megaoperación este martes contra traficantes do Comando Vermelho (CV) que actúan en el Complexo da Maré”, dijo en un comunicado la Policía Civil de Río.
La operación se llevó a cabo después de peritajes de inteligencia y seguimiento que revelaron movimientos de delincuentes en la región, investigados no solo por narcotráfico sino también por robo de vehículos.
El operativo implicó el despliegue de numerosas camionetas de la policía y agentes fuertemente armados, bloqueando accesos en el Complexo de Alemão. Fotos publicadas por la policía militar mostraban excavadoras removiendo barreras metálicas colocadas por los delincuentes en distintos accesos del Complexo do Alemão. Además, se observaron barricadas con neumáticos y muebles, algunas de las cuales estaban en llamas.
El hecho obligó a la suspensión de clases en decenas de centros educativos, afectando a 20,500 alumnos.
Las operaciones policiales contra el crimen organizado son frecuentes en las barriadas de Río, donde los enfrentamientos a tiros entre la policía y los traficantes son comunes, afectando a la población que queda en medio del fuego cruzado.
A finales de septiembre, el gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva anunció que destinaría 900 millones de reales (unos 180 millones de dólares) en los próximos tres años para un plan nacional para combatir organizaciones criminales, en coordinación con las autoridades de los estados.
Especialistas y organizaciones de derechos humanos critican este tipo de abordaje, alegando que tiene una baja eficacia contra las organizaciones criminales. En agosto de 2023, incursiones antidrogas en varias favelas de Río, São Paulo y Bahía dejaron 44 muertos en menos de una semana.