Detuvieron y acusaron de presunto “homicidio frustrado” al carabinero que provocó la grave caída de un menor desde un puente durante una protesta en Santiago, en una nueva polémica por exceso de fuerza que involucra a la Policía local.
El policía antimotines fue detenido el sábado luego que la Fiscalía inició una investigación en la que estableció que el oficial provocó la caída del menor de 16 años desde el puente Pio Nono, al menos a cinco metros sobre el lecho casi seco del río Mapocho.
El hecho se dio en el marco de una protesta en los alrededores de la céntrica plaza Italia de Santiago el viernes, cuando un grupo de manifestantes era perseguido por policías.
“Fiscalía detiene a carabinero por provocar caída de adolescente desde Puente Pio Nono a Río Mapocho. Diligencias desarrolladas desde ayer por fiscal Patricio Macaya, equipo de Flagrancia de Fiscalía y @PDI_Chile establecen presunto delito de homicidio frustrado”, indicó un mensaje de la Fiscalía centro-norte de Santiago, en su cuenta de Twitter.
Tras conocerse la detención, más de un millar de personas acudieron a Plaza Italia para manifestarse con banderas, bocinas y gritos, a casi dos semanas de cumplirse un año del estallido social en Chile.
Este lugar, renombrado por los manifestantes como “Plaza Dignidad”, fue el epicentro de las movilizaciones iniciadas el 18 de octubre de 2019 y desde hace un par de semanas ha vuelto a ser escenario de manifestaciones todos los viernes, tras ser interrumpidas en marzo por la pandemia.
Muchos de los manifestantes llegaron a la plaza luego de realizar una protesta fuera de la Clínica Santa María, a donde el menor fue trasladado con diversas lesiones pero sin riesgo vital.
“La salud del joven es estable”, informó Sergio Micco, director del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), quien se reunió en la clínica con los familiares del menor y con otros testigos del incidente, quienes le señalaron que “Carabineros de Chile tuvo participación en el hecho”.
La caída del menor provocó una polémica luego que videos difundidos en redes sociales, que exhiben diversos ángulos de la acción policial durante la protesta del viernes, demuestran para algunos que el joven había sido empujado por policía, mientras otros dan cuenta de un accidente al intentar detenerlo.
Tanto la Policía como el gobierno lamentaron el hecho y dejaron que el Ministerio Público determine cómo ocurrió el incidente y si el policía tenía responsabilidad o no .
“Condenamos, como lo hemos hecho siempre, todo hecho de violencia y transgresión a los derechos humanos, pero creemos que las investigaciones son las que deben llevar claridad sobre si se cumplieron o no los protocolos de Carabineros y si los hechos son constitutivos de delito o no”, dijo Pérez en una declaración en Palacio de Gobierno, antes de conocerse la detención.
Según Pérez, tras múltiples denuncias de organismos internacionales sobre violaciones a los derechos humanos por parte de la Policía en sus intervenciones en las protestas sociales, “Carabineros ha hecho muchos esfuerzos en el último tiempo para que todo su accionar esté en el marco de los protocolos”.
Pero la oposición de izquierda y organizaciones sociales denunciaron que el menor fue empujado por agentes policiales.
“Lo empujaron directamente al río. Exigimos la renuncia de Mario Rozas (director de la policía) ahora. Sin más excusas y una comisión civil para reforma estructural a Carabineros. Esta barbarie no puede continuar”, dijo el diputado opositor Gabriel Boric.
Informes de organismos como Amnistía Internacional o Human Rights Watch constataron graves violaciones a los derechos humanos cometidas por la policía en el marco del estallido social que dejó una treintena de muertos.
“La @CIDH expresa su firme condena contra este hecho y llama al Estado de #ChileBandera de Chile a realizar investigaciones con debida diligencia, así como respetar el deber de protección especial de los #DDHH de #NiñasNiñosAdolescentes, particularmente en el contexto de las protestas”, indicó un comunicado de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos sobre el incidente del menor.
El uso de escopetas antidisturbios y el disparo de bombas lacrimógenas directo al cuerpo por parte de la Policía durante las manifestaciones sociales dejaron más de 300 personas con heridas oculares.
Dos quedaron ciegas: el estudiante Gustavo Gatica, quien recibió disparos de perdigones en sus ojos durante una protesta, y Fabiola Campillai, impactada por una bomba lacrimógena en la cabeza cuando esperaba un autobús para dirigirse a su trabajo.