La Justicia brasileña investiga si la diputada y pastora evangelista Flordelis Souza asesinó de 30 disparos a su marido, el pastor Anderson de Carmo, por cuestiones financieras. El crimen, sucedido en junio de 2019, se habría realizado con la complicidad de cinco de sus 55 hijos y una nieta.
Souza es diputada federal del oficialista Partido Social Democrático (PSD), aliada del presidente Jair Bolsonaro y se hizo famosa por tener su propia “iglesia” neopentecostal y tener 55 hijos, la mayoría adoptivos.
El lunes, nueve hijos y un nieto fueron detenidos acusados de participar del plan de envenenamiento, homicidio y robo de los bienes del pastor Anderson, pero ella está libre a raíz de su inmunidad parlamentaria.
Según la fiscalía de Río de Janeiro, la diputada intentó matar en cinco oportunidades por envenenamiento a su marido por disputas con el reparto financiero de sus actividades religiosas en el llamado “Ministerio Flordelis”. Los templos estaban repartidos en los barrios más pobres y violentos de los suburbios de Río de Janeiro.
”El 20 por ciento de la familia está involucrada”, aseguró un portavoz policial entrevistado por la cadena Globo.
La pastora fue la quinta más votada en las elecciones generales de 2018 en el estado de Río de Janeiro, de la mano de la ola evangélica y con un discurso a favor de la seguridad con el cual venció en 2018 el presidente Jair Bolsonaro.
Las investigaciones apuntan que Flávio dos Santos Rodrigues, hijo biológico de Flordelis, disparó contra su padrastro con un arma comprada por Lucas César dos Santos, hijo adoptivo de la pareja. Ambos están presos desde el año pasado.