Una creadora de contenido de OnlyFans (OF) se convirtió en el centro de la polémica tras cumplir un curioso reto que circuló por todas las redes sociales: tener relaciones sexuales con 100 hombres en menos de 24 horas. Siendo una de las más reconocidas en el mundo de las plataformas para adultos, la actriz Lily Philips generó un acalorado debate entre sus seguidores, quienes se preocuparon ante el peligro que se enfrentaba.
Sin embargo, a pesar de las críticas y advertencias, nada le importó a la influencer y llevó a cabo su cometido. Luego de la insólita experiencia, la joven participó de un documental junto con Joshua Pieters, quien decidió contar en detalle la historia. El 7 de diciembre, el documentalista subió la entrevista de 47 minutos a su canal de Youtube y consiguió casi un millón de visitas en tan solo 4 días.
En dicho video, la actriz de OnlyFans compartió cómo se sintió durante todo el día y confesó cómo se llevó a cabo todo el proceso. Para crear mayor expectativa, Joshua Pieters publicó un pequeño fragmento de la charla en la red social X y causó furor. La publicación acumula 181,1 millones de visualizaciones y más de 70 mil “me gustas”.
En la pequeña grabación, se observa cómo la joven termina entre lágrimas mientras revela lo sucedido en aquella oportunidad. Según contó el documentalista, la habitación donde se llevó a cabo el desafío “apestaba” debido a la constante entrada y salida de los hombres. Al principio, la actriz se mostró segura ante las cámaras, pero con el paso de los minutos terminó desmoronándose.
“Ciertamente, no esperaba ver a Lily tan molesta al final de todo. Pensé que tal vez en los años venideros ella recordaría este día con tristeza, pero no tan inmediatamente después”, expresó Pieters. Por su parte, ella indicó: “No es para las chicas débiles. Si soy honesta, fue difícil. No sé lo recomendaría a nadie”.
Por otro lado, la joven relató que se sintió presionada por la expectativa de “darles un buen rato” a los participantes. Sin embargo, al continuar el relato, confesó con ojos llorosos que la experiencia fue “algo así como ser una prostituta”.