Por Victoria Navicelli. Contactala aquí.
Continuamos con nuestras sesiones de yoga en casa. ¿Estás realizando la práctica? La única manera de sentir los resultados es ser constante y disciplinado. Las posturas son una invitación a reencontrarte con vos misma y a reconocer las posibilidades de tu cuerpo.
En esta edición vamos a practicar Utkatasana o postura de la silla. Es una asana que simula la forma que adoptamos al sentarnos, sin terminar de acomodarnos en una superficie. Es engañosamente sencilla y exige de nuestra parte mucha fuerza abdominal.
Su nombre original en sánscrito es fiel reflejo de la intensidad que mencionamos anteriormente: “Utkata” significa “poderoso” o “fuerte”. Esta denominación coincide más con la sensación que produce.
¿Cómo practicarla?
1. Comenzamos en Tadasana. Pies paralelos a la línea de la cadera y ligeramente separados.
2. Estirar los brazos por encima de la cabeza con las palmas enfrentadas. Codos estirados.
3. Flexionar las rodillas intentando que queden a la misma altura que los tobillos.
4. Empujar la pelvis hacia abajo, como si estuviéramos sentados en una silla imaginaria.
5. El torso debería formar un ángulo recto con los muslos.
6. Mantener la postura respirando normalmente durante unos 30 segundos.
Beneficios
· Ejercita la columna
· Fortalece la zona abdominal
· Ayuda a estabilizar y movilizar las rodillas
· Fortalece los muslos, tobillos y piernas
· Provee fuerza y flexibilidad a hombros y brazos
· Estira la parte inferior de la espalda y el torso
· Trabaja la musculatura de los pies
· Ideal para adelgazar, fortalecer piernas y aumentar los glúteos.
Recomendaciones
· Durante la práctica mantené la sonrisa en tu rostro. Esto activa un estado mental positivo y colabora en sostener la postura.
· No practicarla en caso de dolores crónicos en las rodillas, artritis, torcedura de tobillo, problemas en los ligamentos, dolor de cabeza o insomnio.
- La espalda no debe inclinarse demasiado hacia delante, debe dibujar una línea diagonal.
- Los hombros se encuentran relajados, atrás y abajo, no pegados a las orejas.
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