El confinamiento cambió la dinámica laboral y social, logrando que las personas valoráramos los espacios; es una realidad que el hogar toma especial relevancia y vemos la necesidad de configurar.
Ante esto, te contamos los motivos por los cuales se debe contratar a un diseñador de interiores.
Asesoría profesional
El diseñador o la diseñadora ofrece una evaluación profesional del proyecto y un plan de acción clave para determinar lo que puede ser reutilizado o desechado. “La mirada hábil de un experto repara en detalles que quizá tú nunca tendrías en cuenta, mientras estudia y evalúa con precisión tanto tus necesidades como las de la vivienda para conseguir con la reforma, la mejor solución”, aseguran los profesionales.
Ahorro de dinero
La contratación de este profesional puede ayudar a ahorrar a largo plazo, al evitar errores costosos en el diseño de la casa y aumentar su valor en caso de venta, lo cual reduce notablemente el tiempo para realizar cualquier transacción.
Funcionalidad y estética perfectamente combinados
El diseñador o la diseñadora no solo se dedica a crear espacio estéticos, también tiene en cuenta la funcionalidad y los requerimientos por parte del cliente, con el cual sopesa cada una de las opciones y diseña cada elemento, basado en las necesidades del usuario, recopiladas a lo largo del proceso.
Conocimiento del mercado
Este profesional te asesora sobre los materiales que te convienen, asimismo te ayuda a escogerlos; y toma en cuenta los aspectos como fontanería, electricidad, acústica, climatización, entre otros temas que tal vez a alguien no profesional se le pasen por alto al momento de hacer la reforma.
Dar forma a la casa de tus sueños
El interiorista tiene la sabiduría necesaria relacionada con el saber hacer, es decir, con el cómo.
Estudio personalizado del espacio
El valor diferencial de los servicios de interiorismo es que el experto consigue tener una visión integral del espacio disponible y de las oportunidades de expresión que ofrece a través del lenguaje del diseño.