Con la llegada del período estival nos llega la necesidad de tener nuestros hogares bien climatizados y con una temperatura confortable. Sin duda, una de las mejores opciones es decidirnos por adquirir un aire acondicionado.
Y es que el mercado de equipos y soluciones de climatización sigue creciendo en nuestro país. Pero antes de decantarnos por la compra de un aire acondicionado es importante que tengamos en cuenta una serie de aspectos. Te lo contamos todo a continuación:
1. El tamaño de la habitación delimita su potencia
¿Sabías que la potencia del sistema de climatización debe estar en consonancia con el tamaño del cuarto? ¿Y que la potencia o capacidad de enfriamiento de un aire acondicionado se denomina frigorías?
Y es que una pieza muy grande no podrá ser enfriada por un aparato con pocas frigorías. Así como, un aparato con muchas frigorías estaría desperdiciando potencia en un cuarto pequeño. Por eso es más importante conocer la potencia que necesitan las estancias a climatizar que el propio tamaño de éstas.
2. Lugar de instalación
No todas las habitaciones tienen las mismas necesidades de climatización. Por eso es aconsejable no solo tener claro el número de habitaciones, sino también su disposición. Ya que, dependiendo de ello, será un tipo u otro sistema de climatización más apto para nuestra casa. Por lo general, los sistemas de aire acondicionado suelen ponerse donde se va a pasar más tiempo, especialmente en habitaciones de uso común como dormitorios y salas.
3. Distancia de instalación (unidad exterior e interior)
A la hora de su instalación, no sólo debemos tener en cuenta el lugar, sino también la distancia. ¿Sabías que cuanto mayor sea la distancia entre el aparato del interior y el del exterior menor será el rendimiento del sistema? Por ejemplo, en una instalación de 5 metros de separación, una de 10 metros supone una pérdida de rendimiento de entre un 3% y un 5%, y una de 15 metros, entre un 7% y un 10%. Además, no todos los fabricantes ofrecen las mismas posibilidades en cuanto a las distancias de instalación.
En lo que respecta a la unidad exterior, su localización es muy importante. Poder tener una ventilación adecuada es esencial. Por lo que, si se instala cerca de una pared, no debemos olvidar que debe quedar suficiente distancia para que el aire fluya con facilidad. Por eso, es preferible instalarlo en un lugar sombreado. ¿Por qué? La diferencia de temperatura de estar bajo la luz solar directa o estar en la sombra puede ser de 5 ºC a 10 ºC. Una diferencia que nos puede implicar hasta un 20% de exceso de consumo. En el caso de la unidad interior el aspecto que tenemos que priorizar es el ahorro energético. Aunque actualmente existen también equipos donde la estética juega un papel importante.
4. Entender el significado del ERR
Significa “Potencia frigorífica o Potencia eléctrica” consumida en refrigeración. El ERR mide la eficiencia de la unidad de aire acondicionado, que es más eficiente cuanto más alto sea el EER. Esto implica un menor coste de funcionamiento. ¿Sabías que los aparatos más eficientes suelen rondar los 13 EER?
5. Tecnología inverter como solución eficiente
Contar con un sistema de aire acondicionado con tecnología inverter no solo maximiza la capacidad de refrigeración, sino que también la mantiene constante. ¿En qué nos favorece esto? Permite que no haya grandes cambios de temperatura, que aumente la eficiencia del aire acondicionado y que ganemos en confort. En otras palabras, su función, no es otra, que regular la velocidad del compresor. Para que, sin llegar a parar, disminuya su velocidad hasta el mínimo necesario para mantener la temperatura deseada.
6. Tener clara la etiqueta energética
La etiqueta energética es algo muy importante a la hora de elegir un buen sistema de aire acondicionado. En ella podrás ver, no solo el producto, el modelo y características, como el nivel sonoro; sino también, la clasificación energética o la potencia refrigerante.
Como ya hemos comentado anteriormente, la potencia del equipo viene determinada por las frigorías, y se determinan con relación a los metros cuadrados de la habitación donde vayas a colocar el aparato. Aunque adquieras un equipo más potente no significa que el gasto en consumo vaya a ser mayor, sino que alcanzará antes la temperatura que desees.