Sinceridad en diseño y materialidad
El objetivo, además de crear un espacio renovado, era el de no olvidar la esencia y valores de una empresa con más de 50 años de historia, ubicada en Valencia, España.
Los preceptos para cumplir por parte del espacio están basados en sacar partido a la esencia misma de los materiales que predominan en cada estancia, la exquisitez en el tratamiento de estos, y el diseño.
El contraste entre paredes, suelo y mobiliario refuerza la importancia de la materialidad. Desde la recepción hasta las oficinas y salas de juntas, se crea un efecto de continuidad en términos estéticos y decorativos que armoniza todo el despacho. Así se consigue que todas las salas tengan la misma importancia.
El negro profundo y texturizado de la moqueta de Interface, contrasta con la suavidad de tonos, materia metálica, marmórea, y madera del mobiliario. Por lo que respecta al mobiliario auxiliar, recupera la importancia de estas piezas. Se ponen en valor, haciendo que el espacio luzca y brille con personalidad. En este caso, se apuesta por los aparadores de Momocca, presentes en sus configuraciones originales, pero también, de módulos apilados y con mesitas auxiliares Adara Light.
El papel de la iluminación resulta esencial ya que da volumen y potencia los elementos anteriormente descritos. Los materiales naturales necesitan de una correcta iluminación para que, en conjunto, creen un espacio que aporte sensación de calidez y bienestar, indispensable en los requerimientos del proyecto de cara a su funcionalidad como oficina.
El resultado es un despacho de abogados en el que el interiorista ha sabido captar el alma del espacio y transmitirla a través de la sinceridad en el diseño y la materialidad.