Georgia se impuso con más apuros de los esperados a Namibia por 17-16, este miércoles en Exeter, en partido del Grupo C del Mundial de rugby, con lo que ganó muchas opciones para asegurarse el tercer puesto de la llave, sinónimo de clasificación al próximo Mundial de Japón-2019.
Tras este triunfo, Georgia, que ya disputó sus cuatro partidos del grupo tiene ocho puntos, dos más que Tonga, que para superarle debería imponerse el viernes a la todopoderosa Nueva Zelanda, clasificada ya como líder de la llave y última campeona mundial.
Namibia, por su parte, deberá afrontar su último partido del grupo el domingo contra Argentina, que habrá contado con tres días más de descanso.
Argentina tiene casi asegurada la segunda plaza, ya que una victoria de Nueva Zelanda el viernes contra Tonga le aseguraría esa posición, sinónimo de billete a cuartos de final.
En caso de sorpresiva derrota de los All Blacks ante Tonga, a Argentina le bastaría con ganar a Namibia e incluso perder por siete puntos o menos, con lo que se llevaría el punto bonus defensivo.
El partido entre Georgia y Namibia tuvo cambios bruscos en el marcador. Los africanos se pusieron sorprendentemente con ventaja de 6-0 en el marcador, gracias a dos penales de Taw Kotze al inicio del partido. Y con ese tanteador se llegó al descanso.
Georgia le dio la vuelta al partido con dos tries, apoyados por su capitán Mamuka Gorgodze (50) y el apertura Lasha Malaghuradze (55), que con las consiguientes conversiones y un penal del fullback Merab Kvirikashvili, permitieron a los europeos ponerse claramente por delante en el marcador (17-6).
Pero Namibia, por medio de Taw Kotze, que marcó los 16 puntos de su equipo, terminó al final de partido a una unidad de Georgia, gracias un try del apertura (74), una conversión y un penal.