El entrenador de baloncesto de Senegal, Cheikh Sarr, equipo que está compitiendo en el Mundial de básquet que se celebra en España, admitió cierta preocupación de la delegación africana por la evolución de la epidemia de ébola en África, después de que se confirmase el primer caso en su país.
"Es verdad que llamas a la familia todos los días para tener noticias", declaró el técnico en Sevilla, sede del grupo B de Mundial de básquet, tras el entrenamiento del martes.
Senegal, que mañana se enfrentará a Argentina, está siendo la sensación del campeonato tras ganar a Puerto Rico y Croacia, lo que prácticamente asegura a los africanos clasificarse para los octavos de final, un hito histórico para este país.
Por ello, Sarr dice que el equipo está concentrado en el básquet "pero también pensamos en ello", dijo en referencia a la epidemia de ébola que se originó en la vecina Guinea y que se está propagando por varios países de la costa oeste africana, con más de 1.500 fallecidos.
"Esperamos que la enfermedad no se propague y que los médicos puedan controlarla", pidió el técnico.