"Quienes pueden evitar una muerte súbita no son los médicos, sino cualquier persona. Para eso son importantes las áreas cardioprotegidas". Bajo este argumento, Francisco Femenía remarcó la importancia de generar áreas cardioprotegidas en Mendoza. En diálogo con
Salud.com.ar
, el reconocido médico cardiólogo señaló que es necesario que en los lugares públicos se copien los sistemas de los aeropuertos internacionales.
En este sentido, el profesional sostuvo que en los aeropuertos, por ejemplo, hay un desfibrilador cada cierta cantidad de metros con instrucciones de uso en tres idiomas. Así, aquel que no es médico puede entender el mecanismo y salvar una vida. "Si estás en una zona cardioprotegida y hay un desfibrilador automático, cualquier persona está en condiciones de apoyar las paletas en el pecho de una persona que sufre una arritmia grave y salvarla", completó.
Por otra parte, sin una persona sufre un accidente cardiovascular y no hay un desfibrilador disponible, se pueden realizar maniobras de reanimación. "Lo que se logra con las maniobras de reanimación básicas es evitar las secuelas. Se debe masajear el corazón para que siga bombeando sangre. En los 10 ó 15 minutos que puede tardar la ambulancia, se puede evitar las secuelas neurológicas posteriores por la falta de oxígeno en el cerebro", dijo.
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