“Mi hijo es inocente”, empieza a hablar Alejandro Sánchez, padre de Lucas (20) quien desde hace una semana está detenido por el crimen ocurrido en el barrio Virgen del Valle donde murió Adrián Bravo (26). Las denuncias entre la familia de la víctima y del sospechoso, en los últimos días se han entrecruzado no sólo en el ámbito judicial sino también en los medios de prensa.
“A mi hijo todas las pruebas le salieron negativas. Ellos (por los Bravo y otra familia vecina que es “amiga” de los Bravo) mataron al chico", agrega Alejandro.
Según su relato, el lunes 15 su hijo Leonel (hermano de Lucas) y los Bravo mantuvieron una discusión que no pasó a mayores. Pero luego se produjo el tiroteo fatal: “Todos sabíamos que iba a haber algún muerto·, dijeron allegados al detenido.
·Lucas estaba comprando y cuando escuchó los tiros corrió a su casa, donde estaba su madre y su hijo de un año. Entró y se quedó con el bebé.
Mientras, la mamá trababa la puerta porque los agresores se querían meter. Jamás mi hijo tuvo un arma en su mano y el quiosquero es testigo de eso”, aseguró Alejandro. Para probar esto, la familia del detenido tiene fotos y videos tomados por vecinos en donde se ve claramente a un hombre armado (ellos lo identifican como uno de los Bravo) pero para no entorpecer la pesquisa este diario prefirió no publicarlas.
Otros miembros de la familia Sánchez aseguraron haber visto el momento en que en medio del tiroteo apareció “una moto en el que iba un hombre y que le dio un arma a la víctima fatal. Todos en el barrio sabemos que ese sujeto que apareció es policía”, dijeron y atribuyeron ese hecho con las amenazas que han recibido en los últimos días a través de las redes sociales de parte de supuestos miembros de las fuerzas armadas.
“Ellos saben que la bala que mató al chico salió de sus armas. No había ningún Sánchez en el tiroteo”, defendió Alejandro, quien asegura que el asesino es un miembro de la familia “amiga” de los Bravo, apoyándose en testimonios que recogió tras el hecho. Es decir, para los Sánchez la víctima recibió un disparo en medio de la balacera de parte de sus mismos amigos. “Todas las vainas quedaron en el lugar donde ellos estaban disparando”.
“Es imposible que haya sido mi hijo. Estaba adentro de su casa, resguardando a su bebé", dijo y agregó: “Lucas no tiene antecedentes. En la comisaría donde está detenido me dicen que se porta excelente”.
Con la detención de Lucas Sánchez no acabaron los problemas. Su casa fue incendiada y quedó completamente destruida. Además se murieron quemadas las mascotas (perros y aves) que tenían en la vivienda.
Bravo era albañil -se desempeñaba como contratista- y vivía en Bermejo. Cuando ocurrió el hecho había llegado de visita a la casa de su madre y sus hermanos.
Por el momento la causa tiene un solo sospechoso.