El fiscal que investiga la muerte de Ismael Ramírez, el adolescente de 13 años que recibió un tiro en el pecho durante un intento de "robo organizado" a un supermercado de la localidad chaqueña de Presidente Roque Sáenz Peña, aseguró que la bala no salió de un arma de la Policía.
"Se pudo confirmar que se trata de un plomo proveniente no de un arma de puño, sino de una escopeta, o bien de un arma de fabricación casera, una tumbera", aseguró el fiscal Marcelo Soto en base a los resultados de la autopsia realizada en la mañana de ayer.
“El plomo no se condice (con una escopeta de la Policía), es más grande que el común, es un cartucho casero, no el que usa la fuerza policial”, agregó Soto en diálogo con Radio con vos.
Ramírez murió el lunes a la noche durante un enfrentamiento entre la Policía y un grupo de unas 50 personas que intentaba ingresar a un supermercado barrial de la ciudad Sáenz Peña.
El violento episodio ocurrió en el local "Funcional Nuevo Impulso" del Barrio Obrero de esa ciudad, la segunda más importante de la provincia, a 161 kilómetros de Resistencia.
El intendente de Sáenz Peña, Gerardo Cipolini, advirtió este martes que "los nefastos siempre estuvieron incentivando esto", en referencia al intento de saqueo.
"El escenario aquí no es dramático, aquí nadie se muere de hambre. ¿Hay carencias? Sí, pero esta es una provincia donde nadie se muere de hambre", sostuvo en diálogo con La Red.
“La Policía se manejó todo el tiempo con postas de goma”, afirmó y agregó: “el niño muere por un tiroteo previo entre los que defendían el supermercado, porque aparentemente había vecinos armados, el propietario y este grupo de gente”.