Por decisión propia me bauticé a los 16 años, hice mi primera comunión a los 17 y la confirmación a los 27.
Hoy a los 47 años, doy gracias a Dios porque logré madurar y entender que mis creencias no pueden condicionar las decisiones de terceras personas.
Aprendí con el tiempo que muchas mujeres no pueden decidir cuándo tener relaciones sexuales y muchas más ni siquiera elegir un método anticonceptivo...
Aprendí que no soy médica para juzgar las decisiones personalísimas de cada una.
Perdón a todas las que juzgué siendo residente, perdón por no haberlas entendido y acompañado.
Que sea ley.
Dra. Iris Aguilar
Médica - MP 7046