La CGT opositora que encabeza Hugo Moyano convocó ayer a un paro nacional contra el gobierno para el próximo martes 31, en todas las actividades. Amplía la medida de fuerza decidida para ese día por los gremios del transporte, ante la falta de respuesta a sus reclamos por parte de la administración de Cristina Fernández.
La medida promovida por Moyano contará con el respaldo de la opositora CTA-Autónoma del estatal Pablo Micheli que será oficializado hoy, en tanto la CGT Azul y Blanca del gastronómico Luis Barrionuevo definirá en las próximas horas si participa de la protesta, tal como lo hizo en las últimas oportunidades, o no.
Moyano reiteró que “el eje” del paro nacional, que coincidirá con el dispuesto por los gremios del transporte, “es Ganancias, pero también los demás reclamos como el aumento a jubilados, la seguridad y la inflación”, luego de encabezar un plenario de secretarios generales.
Para el martes próximo, los gremios del transporte terrestre, aéreo y marítimo tienen previsto realizar un paro total de actividades que privará, al público en general, del servicio del transporte de pasajeros y de cargas en todo el país.
Ese día no circularán los trenes de pasajeros y de cargas; tampoco lo hará los colectivos de corta, media y larga distancia. La actividad marítimo portuaria quedará paralizada y los gremios aeronáuticos tampoco prestarán servicio.
Paralelamente, la CGT de Moyano prepara un plan de lucha que incluiría un paro nacional de 36 horas con movilización a la Plaza de Mayo y para ello convocó al Comité Central Confederal para el próximo 15 de abril.
Del cónclave participaron, además de Moyano: Guillermo Pereyra (petroleros), Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento), Amadeo Genta (municipales), Gerónimo Venegas (Uatre), Omar Plaini (canillitas) Abel Frutos (panaderos), Jorge Pérez Tamayo (pilotos), Julio González Insfrán (capitanes y oficiales navales), Ricardo Epelbaun (señaleros) y Domingo Pereira (ceramistas), entre otros.
Al término de las deliberaciones, Moyano marcó diferencias con el paro convocado por los gremios del transporte terrestre, aéreo y marítimo, para ese mismo día: “Nosotros convocamos a un paro nacional de todos los gremios, mientras que el de los gremios del transporte, al que yo pertenezco, es un paro sectorial”.
Acerca de la profundización del plan de lucha moyanista contra el gobierno, fuentes de la CGT opositora indicaron que “se viene un paro de 36 horas con movilización porque el gobierno hace oídos sordos de los reclamos que venimos haciendo”.
En ese marco, Moyano se manifestó “preocupado” por la inseguridad y se quejó porque pese al aumento de efectivos policiales en las calles el “flagelo sigue azotando a la gente”.
Prevén fuerte impacto en el sector público y transporte
La sombra de un escenario sin bancos funcionando en torno a la Plaza San Martín; con el transporte público de pasajeros circulando sólo en un 20% por las habitualmente congestionadas calles Patricias Mendocinas, Rioja o Salta; con vuelos suspendidos en el aeropuerto de El Plumerillo, viajes a otras provincias demorados en la Terminal de Ómnibus de Guaymallén y con centros de salud y hospitales atendiendo únicamente urgencias y emergencias, se proyecta sobre Mendoza para el próximo martes.
Es consecuencia del paro nacional dispuesto por la CGT de Hugo Moyano a la que adherirá hoy la CTA de Pablo Micheli mientras se espera que también se sume entre hoy y mañana la central obrera “Azul y Blanca” de Hugo Barrionuevo. Camioneros, bancarios, una parte de los estatales, colectiveros, gastronómicos y un sector de los petroleros, preparan la huelga nacional con la consigna de que el impuesto a las Ganancias se deje de aplicar sobre los sueldos.
Los gremios que promueven la protesta nuclean a los trabajadores con mejores salarios (y por lo tanto los más afectados por el pago de Ganancias) y las organizaciones sindicales de conducciones enfrentadas con el gobierno nacional de Cristina Fernández. Los judiciales provinciales definirán hoy su postura, en un plenario de la federación nacional que se desarrollará esta jornada en San Juan.
En Mendoza el estratégico gremio de Sipemom (Micros y Ómnibus) ya adhirió a la medida de fuerza. Su secretario general, Rodolfo Calcagni, confirmó que los colectivos no comenzarán a circular a las 5 de la mañana del martes 31, aunque no avanzó en el detalle de la modalidad del paro, ya que ésta se terminará de definir mañana en coordinación con otros gremios del sector. La UTA ya dispuso parar el próximo martes -por lo que también resultarán afectados los transportes de media y larga distancia- al igual que los gremios aeronáuticos y camioneros.
En Mendoza la Asociación Trabajadores del Estado y Ampros aún no definen la modalidad de un paro al que ya han adherido, por lo que no se conoce aún si habrá o no marcha de protesta. El pasado 17 de marzo, en una medida similar, ambos gremios marcharon hacia la Casa de Gobierno y fueron multados en 20 mil pesos por la Municipalidad de la Capital, acusados de infringir el Código de Convivencia.
Para el mismo martes 31 está prevista una nueva reunión de la paritaria de Salud (a las 15) aunque la fecha podría ser modificada. En la última negociación el viernes 20 de marzo, el Gobierno provincial ofreció un 34 % de aumento. La propuesta fue rechazada por ATE y Ampros no sólo porque el porcentaje se mantuvo por debajo del 50% reclamado, sino porque la vigencia de la actual escala del impuesto a las Ganancias llevaría a que “el 80 por ciento del personal de la Salud quede alcanzado por el gravamen, tan sólo si se aplica un 30 por ciento de suba”, según indicó la titular de ATE, Raquel Blas.