La vedette Moria Casán llegó esta noche al aeropuerto de la localidad bonaerense de San Fernando tras lograr la libertad condicional en la causa por la apropiación de una joya durante un viaje a Paraguay en 2012, por lo que consideró que la Justicia de ese país es "más rigurosa".
La vedette evitó hablar de esa causa y de otra por drogas, aunque insistió que la "Justicia paraguaya es más rigurosa" y agradeció el trabajo de sus abogados.
"Estoy feliz de estar acá, quiero agradecer al amor de todos. Lo único que me interesa es mi familia. Amo mi país", expresó reiteradamente Casán.
Prometió regresar con obsequios para sus compañeras de celda en la cárcel del "Buen Pastor", que en el pasado fue un convento de religiosas, y donde supo construir una relación de camaradería con las demás internas por espacio de poco más de una semana.
La jueza Dina Marchuk escuchó esta tarde a la vedette en una audiencia, en la que le fijó una fianza de 25.700 dólares y obligó a la actriz argentina a someterse a un tratamiento por su problema de adicción a las drogas.
Tras decidir dejarla en libertad y viajar a la Argentina, donde esta noche, minutos antes de las 22, arribó al aeropuerto de San Fernando para pasar las fiestas junto a su familia.