Moria Casán se cansó. Ya no soporta más los escándalos que protagoniza Vicky Xipolitakis. Es que la Griega ayudó a despegar y aterrizar un avión de Austral y generó polémica, ira y mucha exposición. ¿Todo vale con tal de conseguir rating? Parece que sí, incluso poner en riesgo la vida de 100 pasajeros y dejar a dos pilotos sin trabajo.
"Estoy avergonzada y angustiada por todo lo que se generó por una persona con una adicción dura, como todas las adicciones, que es a ella misma", le escribió Moria Casán a Marina Calabró.
Los mensajes fueron más. "Estoy saliendo de una historia con mi hija y ahora esto. No comparo por supuesto y no aplico correctivos en este caso, sólo sugerir, como hace mucho lo hago sin tener resultados: terapia urgente. Hasta ahora no se me respeta y puentean la exposición casi obscena. Estoy segura que una vez más no se me va a escuchar, no se va a escuchar mi pedido", dijo Moria quien aclaró que Vicki es adicta "a ella misma".
"Moraleja: dedicación exclusiva a mi trabajo, mis nietos, mi hija y no más disgustos con señoritas rebeldes a las que quiero y seguiré queriendo", remató sin dramas.